El gobernador de Texas, Rick Perry, anunció este jueves su retirada de la carrera hacia la candidatura republicana para la presidencia estadounidense y manifestó su apoyo al expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich.

“Llegué a la conclusión de que no hay un camino viable para mí en esta campaña de 2012. Por lo tanto, suspendo hoy (jueves) mi campaña y apoyo a Newt Gingrich para la presidencia de Estados Unidos”, dijo en la ciudad de Charleston, del estado de Carolina del Sur (sureste).

“Como texano, nunca me retiré de una pelea, particularmente cuando consideré que la causa era justa, pero como alquien ha siempre admiró a un gran, si no el mayor, gobernador de Texas (sur) Sam Houston, sé cuándo es el momento de hacer una retirada estratégica”, afirmó.

En un acto de campaña poco después del anuncio de Perry, Gingrich dijo ante un grupo de seguidores que se sentía “muy honrado” al contar ahora con el respaldo del Gobernador de Texas.

Perry describió a su ex rival por la nominación republicana como “un visionario conservador que puede transformar a nuestro país”.

La campaña de Perry ha estado en horas bajas durante bastante tiempo, pero su apoyo a Gingrich representa un importante estímulo para éste, que intenta superar al actual favorito entre los precandidatos republicanos, Mitt Romney, en la crucial primaria del sábado en Carolina del Sur.

El sitio web de Washington Poltico había anticipado el anuncio de Perry y el New York Times había corroborado la información.

Los cuatro candidatos restantes (Gingrich, Romney, el cristiano conservador Rick Santorum y el veterano congresista tejano Ron Paul) se medirán en la noche del jueves en el último debate antes de la votación del sábado en Carolina del Sur.

Este jueves también se dio a conocer que Rick Santorum fue finalmente el ganador de la primaria de Iowa, superando a su rival Mitt Romney, a quien le fue originalmente atribuido el triunfo en la votación del pasado 3 de enero.

El recuento certificado de los sufragios reveló que Santorum superó por 34 votos a Romney, pese a que el resultado definitivo podría no conocerse nunca debido a que el partido republicano de Iowa informó que los resultados de ocho distritos electorales en la región central del Estado se perdieron.