El día de descanso en Copiapó, de cara a la octava etapa del Dakar 2012, permitió que el ministro de Economía Pablo Longueira probara el auto de competencia del piloto de AutoGasco Fernando León, acelerando a fondo por el Desierto de Atacama.

Reconociendo su condición “no muy tuerca”, Longueira planteó sus dudas sobre el andar del vehículo, las que una vez resueltas por León, permitieron que el secretario de Estado condujera sin problemas, y con ganas de más.

“Se nota que maneja, primero me dijo ¿es difícil manejar esta cuestión, mira que yo manejo puros automáticos?. Le dije que no, que metiera los cambios como siempre no más, así que anduvo súper bien. Eso sí se me anduvo alargando el recorrido, quería subir a los cerros, tuve que pararlo y decirle que ya se diera la vuelta”, contó León.

El piloto agregó que Longueira manejó bien. “Cuando veía un hoyo se corría para el lado, anduvo a campo traviesa y pasaba rápido por los baches. Se nota que tiene muñeca”, dijo.

Para Longueira fue toda una novedad y destacó el andar del auto y su posibilidad de funcionar a gas vehicular. Además, bromeó al consultársele por el carácter presidencial de la actividad, considerando que los únicos que suben al auto sin casco son los mandatarios, tal como ocurrió el año pasado con el Presidente Sebastián Piñera.

“¿Creen que puede ser un augurio?. Bueno, puede ser una buena señal… Me ofrecieron el casco y no me lo quise poner”, indicó el ministro de Economía.

El recorrido dio además para una anécdota con la seguridad dispuesta por Carabineros en el entorno del evento, que casi deja al binomio Longueira-León fuera de carrera.

“El carabinero que estaba a caballo cuidando el perímetro no quería dejarlo pasar. Oiga, soy el ministro, déjeme pasar le dijo… no le creyó mucho pero pasamos”, reveló León, piloto AutoGasco que marcha 29º de la clasificación general.

Pablo Longueira | Prensa Autogasco

Pablo Longueira | Prensa Autogasco