PepsiCo, empresa de renombre mundial por sus bebestibles, se ha visto envuelta en una gran controversia luego de haber aseverado que una de sus bebidas era capaz de disolver el cadáver de un ratón.

La polémica comenzó a desarrollarse luego de que Ronald Ball, un hombre oriundo de Wisconsin (EEUU), demandara a la compañía tras encontrar un ratón muerto en una lata de ‘Mountain Dew’; gaseosa con agregado de cafeína que es relacionada con el deporte en su publicidad.

En palabras del demandante, en 2009 él adquirió una lata de dicha bebida en una máquina dispensadora que estaba ubicada en su lugar de trabajo. Sin embargo, al probarla notó un sabor raro, descubriendo posteriormente el cuerpo del animal.

Ante el hecho, se contactó con el servicio al consumidor de la empresa, desde donde recibieron los restos del ratón para estudiarlos.

Luego del hecho, y que el hombre asegurara que PepsiCo destruyó evidencias del caso al devolverle en peor estado los restos del roedor, Ball decidió demandar a la empresa por 50 mil dólares en daños -más de 25 millones de pesos-.

No obstante, la compañía quiso restar importancia al suceso. Para ello, contrató a un veterinario llamado Lawrence McGill que estudió al animal, asegurando que es imposible que se haya encontrado un ratón en la lata porque el ácido usado para embotellar la bebida lo habría desintegrado.

De hecho, McGill afirmó que era aún menos probable ya que el producto fue sellado en abril de 2008, y bastan 30 días para que un pequeño roedor como ese haya “desaparecido” por completo, debido a los componentes de la bebida.

Finalmente, desde The Huffington Post creen que hay otro elemento de la gaseosa que pudo haber eliminado al animal: el Aceite Vegetal Bromado (BVO por sus siglas en inglés), un químico que ha sido prohibido en Europa y Japón, pero cuyo uso es permitido en pequeñas cantidades en productos como Mountain Dew, Fanta y Squirt, ya que les da más consistencia en su sabor.