La Brigada de Investigación Criminal de la Policía de Investigaciones de San Felipe logró la detención de una mujer de 43 años que trabajaba como asesora del hogar para una familia de comerciantes, a quienes robó desde noviembre cerca de 5 millones de pesos en joyas.

Las especies eran guardadas por la familia en una caja fuerte, desde donde la mujer sacaba periódicamente las joyas reduciéndolas en los locales de compra venta de oro. Cuando los dueños de casa se dieron cuenta, la mujer huyó siendo encontrada en Rancagua por efectivos policiales. Así lo explicó el subprefecto jefe de la brigada, Iván López.

Parte del botín la mujer lo utilizó para comprar muebles, línea blanca y eléctrodomésticos, los que fueron incautados, junto con 10 anillos que aún mantenía en su poder.

La mujer no ha sido formalizada todavía, pero fue citada a la Fiscalía local.