El gobierno británico está estudiando la posibilidad de que el primero de mayo deje de ser festivo y reemplazarlo por otra jornada feriada en el mes de octubre para repartir mejor los días no laborables a lo largo del año, informaron fuentes oficiales el sábado.

El primero de mayo cae demasiado a menudo muy cerca de los festivos de Pascua y un día feriado en otoño permitiría promover el turismo, indican las autoridades británicas.

“Un día festivo en otoño podría ayudar a los comerciantes en un momento en el que a menudo sigue haciendo bueno y darle la ocasión a la gente de tomar un poco de aire antes del frenético periodo de Navidad”, estimó el Secretario de Estado encargado del Turismo, John Penrose.

“Un día festivo en otoño, que podría llamarse por ejemplo ‘La Jornada de Gran Bretaña’, no solo ayudaría a la industria (del turismo), pero nos permitiría poner el acento sobre lo mejor que puede ofrecer el país”, añadió.

No se tomó todavía ninguna decisión definitiva, precisó, y añadió que si se desplazaba la festividad del 1 de mayo, esto no ocurriría antes de 2013.

El primero de mayo, día de los trabajadores, es festivo en numerosos países. En Gran Bretaña lo es desde 1978.

El proyecto del gobierno del conservador David Cameron, en el poder desde mayo de 2010, provocó vivas reacciones sindicales.

“Lo último que necesitamos es que el gobierno toque los días festivos existentes y con los que los trabajadores y los comerciantes se han organizado”, estimó Brendan Barber, secretario general de la confederación de los sindicatos británicos Trade Union Congress (TUC).

“Algunos pioneros conservadores están obsesionados con el día festivo del 1 de mayo, debido a su relación con el día internacional de los trabajadores. Pero en realidad, la celebración del primero de mayo en nuestro país se remonta al siglo IV”, añadió. Tradicionalmente, es la ocasión para los británicos de celebrar la llegada del buen tiempo.