El presidente de la Federación de Instituciones de Educación Particular (FIDE), que reúne a colegios católicos, refutó las críticas del sacerdote jesuita, Felipe Berríos, sobre la discriminación que cometerían los establecimientos al seleccionar a sus alumnos.

Las declaraciones que realizó el sacerdote jesuita, Felipe Berríos, al programa El Informante de Televisión Nacional sobre la discriminación que cometen los colegios católicos al seleccionar a sus alumnos, encontraron eco entre expertos y estudiantes universitarios, quienes coincidieron con el análisis que realizó el excapellán de Un Techo para Chile.

En la entrevista, Berríos, indicó que los establecimientos educacionales que funcionan bajo el alero de congregaciones católicas, segregan al momento de seleccionar a los estudiantes por su condición socioeconómica, por la religión que profesan o el estado civil de sus padres.

Estas declaraciones fueron refutadas por Jesús Triguero, presidente de la FIDE, que agrupa a más de 800 colegios pagados, subvencionados y gratuitos, en su mayoría católicos.

Según Triguero, Felipe Berríos se equivoca al plantear su crítica, debido a que engloba a todos los establecimientos educacionales católicos, descartando que éstos realicen procesos de selección como lo planteó el sacerdote jesuita.

Pese a esto, existe una serie de estudios que apuntan que los colegios católicos son los más selectivos, incumpliendo además el deber que tienen de proteger la libertad de los padres para elegir la escuela de sus hijos, como lo consagra el derecho eclesiástico.

Para el experto del Centro de Investigación y Desarrollo de la Educación de la Universidad Alberto Hurtado, Juan Eduardo García-Huidobro, el problema radica en que la ley sólo prohíbe la selección de alumnos de primero a sexto básico.

Además, indicó que el financiamiento compartido es otra herramienta más para la segregación escolar.

García-Huidobro sostiene que una forma de terminar con la segregación es suprimir progresivamente el financiamiento compartido, junto con mejorar la calidad de los establecimientos.

Para el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Diego Vela, lo planteado por el sacerdote Felipe Berríos va en concordancia con las demandas que el movimiento estudiantil ha puesto en el debate, como es el caso de la segregación.

Según el estudio realizado por los investigadores Ignacio y Cristóbal Madero, en la educación subvencionada el 65,7% de las escuelas católicas selecciona a sus alumnos de acuerdo a la capacidad de pago de sus familias.

Mientras que en la educación particular, el 97,2% de los establecimientos católicos hace una selección social de sus estudiantes y un 83% se centra en el nivel de conocimiento del alumno.