Los regantes de la parte baja del Valle de Copiapó, que llevan varias semanas quejándose de la situación, trasladaron esta vez sus reclamos a los tribunales.

Esto, luego que interpusieran un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de la ciudad, para revertir lo que sería una apropiación indebida de las aguas del tranque Lautaro.

Lo anterior, les afectaría profundamente, ya que aseguran que no se les permite trabajar normalmente con sus cultivos.

Los dardos de los expertos en hortalizas apuntan a los empresarios parroneros del lugar, quienes estarían acaparando el agua de deshielo para conservarla hasta septiembre, que es cuando comienza la temporada de uvas en el valle.

Angelo Ghilglino, representante de los agricultores presuntamente afectados, lamentó tener que llegar a este tipo de instancias y en conversación Radio Bío Bío explicó más a fondo la situación.

Un total de 600 serían los hortaliceros afectados, más aún considerando la falta de lluvias y el uso excesivo de las aguas del río que mantiene seco el cauce de agua superficial. Además, los pozos aprovechables de varios sectores de la cuenca no pueden ser utilizados, ya que se han secado las napas subterráneas por el sobreconsumo.