Expertos de todo el mundo han reconstruido a uno de nuestros más icónicos antepasados desde los huesos, el antiguo hombre de Neanderthal.

Los investigadores aseguran que es la primera reconstrucción real del homínido, la que está basada en un esqueleto descubierto en Francia hace más de un siglo.

Su cráneo es uno de los hallazgos más grandes de nuestra época, ya que es el más completo que se ha encontrado hasta ahora, al igual que sus huesos de los pies y manos, según la información recogida por la BBC.

De este esqueleto, denominado Ferrassie, no se encontraron la parte del tórax, la pelvis y algunas piezas de la espina dorsal.

El artista Viktor Deak, quien es especialista en reconstrucciones e imágenes de los hombres que habitaron otros periodos terrestres, rellenó los vacíos con huesos descubiertos en las cuevas Kebara en Israel (1982).

Luego de juntar las piezas y arreglar la postura del esqueleto, el siguiente paso fue añadir los músculos, lo que no representó una tarea fácil debido a la inexistencia de un registro certero al respecto.

Esta operación fue guiada por Jez Gibson-Harris, quien indicó que la textura y el tamaño de los huesos sirvieron como guía para conocer la clase de músculos que poseían los homínidos.

Cabe mencionar que los huesos de los brazos son asimétricos, pues el derecho es más largo que el izquierdo; además, éstos cambian su forma a lo largo de la vida.

El equipo estudió la forma en que los neanderthal transportaban sus materiales y alimentos, para comprobar si ésta afectaba la organización y composición de los huesos.

Finalmente, se logró humanizar esta reconstrucción cuando la piel estuvo completa, dejando al descubierto un tono de tez claro, característico de un clima norteño en el hemisferio norte.

Puedes ver el video de la reconstrucción a continuación:

http://youtu.be/Svdvm-i0mek