Durante los últimos años, se ha desarrollado un nuevo mercado en internet que ha causado furor: películas de pago por internet.
Desde la comodidad de la casa, compartiendo en familia, en pareja o con los amigos, ahora los usuarios de algunos sitios web tienen el privilegio de pagar una módica suma de dinero a cambio de disfrutar lo mejor del cine en su computador.
Este negocio ha resultado ser de una alta rentabilidad, según lo publicado por FayerWayer en lo concerniente a Netflix.
Estos websites traen, en algunos casos, una amplia gama de películas, series e inclusive música. ¿Quieres saber más? A continuación te entregamos los servicios que puedes utilizar en Chile junto a algunos datos que pueden interesarte.
Netflix
Netflix
Este servicio tiene su origen en Estados Unidos en la década del 90 y llega a Chile en septiembre de 2011. Una de sus principales ventajas es la puntuación de las películas, de forma que entregas referencias a otros usuarios y ellos a ti.
En Chile, el precio es de $3.790, un monto accesible para la mayoría de los chilenos. Por este monto, puedes acceder a una base con más de 250 largometrajes, entre los que hay documentales, musicales y cine arte.
Entre las falencias de Netflix está la tardanza de los estrenos. En general, las series y películas que se encuentran disponibles suelen ser del año anterior. Por otra parte, la única forma de pagar es con tarjeta de crédito. ¿Y si no tienes una?
SundayTV
SundayTV
Este servicio trae casi 300 títulos de cine moderno, clásico, bélico y arte. Además, ofrece una pequeña variedad de series y música, lo que le otorga un valor agregado por sobre las otras compañías del mismo servicio.
Por otra parte, también incluye en su menú un apartado “infantil”, donde los más pequeños del hogar pueden acceder a sus series favoritas. Entre los “monitos” que aquí encontramos están Dexter, Billy y Mandy, además de populares películas como Toy Story o Tierra de Osos.
Otra ventaja –la mejor, para los adictos a los smartphones– es que cuenta con una aplicación para teléfonos móviles, pudiendo acceder a tus series o películas en cualquier parte.
La suscripción a este servicio, al igual que el anterior, es mensual y la suma a cancelar es de $3.490.
¿Por qué pagar si puedes ver en Cuevana u otra página similar? Pues, estos servicios te ofrecen estabilidad y perdurabilidad en el tiempo. Al comenzar a ver una serie, sabrás que ésta seguirá ahí para ver el próximo capítulo al día siguiente, cosa que los servicios online gratuitos no pueden garantizarte.
Además, un problema que reclaman los usuarios de los sitios que no exigen dinero para consumir los productos es que –en algunas ocasiones– los subtítulos no están correctamente sincronizados, lo que arruina toda la experiencia.
Sabiendo todo esto, ¿cuál de estas opciones pagarías?
