Un manifestante israelí que se había inmolado por fuego el 14 de julio en Tel Aviv, durante una manifestación por el aniversario del movimiento de protesta social de mediados de 2011, falleció a causa de sus heridas el viernes en la tarde, informaron los medios.

Moshe Silman, de 57 años que se inmoló después de haber acusado al Primer ministro y a la alta sociedad israelí de “robarle”, falleció en el hospital Tel Hashomer, cerca de Tel Aviv, donde estaba siendo atendido.

Un día después, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu había lamentado lo que llamó “una tragedia personal” en un mensaje en su página Facebook.

“Acuso a Israel, a Benjamin Netanyahu y al ministro de Finanzas Yuval Steinitz por la humillación constante que los ciudadanos de Israel deben soportar cotidianamente. Le quitan a los pobres para darle a los ricos”, había declarado Moshe Silman en un carta que leyó a alta voz antes de tratar de poner fin a sus días.

Según los medios, Silman, instalado desde hace varios años en la ciudad de Haifa (norte) tenía un sociedad de transportes que debió vender debido a deudas.

Según su carta, habría estado en la incapacidad de trabajar después de un accidente cerebral y el ministerio de la Vivienda no le habría reconocido el derecho a un subsidio habitacional.

La manifestación del 14 de julio, que reunió a casi 8.000 personas en Tel Aviv, Haifa y Jerusalén, marcaba el aniversario de una importante movilización contra el costo de la vida que culminó en septiembre con casi medio millón de israelíes en las calles.