Medios en Brasil dieron a conocer esta semana la historia de una mujer llamada Josefa Feitosa (61), quien confesó que hace un tiempo se negó a cuidar a sus nietos, a petición de su hija, y tomó la decisión de viajar por el mundo.

La situación ocurrió tiempo antes que apareciera el coronavirus y comenzaran las restricciones. En 2018, ella se jubiló luego de trabajar por décadas en el sistema penitenciario de su país.

En declaración a la cadena Globo, Josefa sostuvo que un día su hija le pidió cuidar a sus nietos por un día. En la ocasión, recordó, la joven le expresó que: “podía hacerlo porque tenía más tiempo”.

No obstante, en ese instante la respuesta de la mujer fue categórica, asegurando que no podía llevar a cabo aquello debido a que “su tiempo de criar había terminado”.

La propia brasileña aseguró que su hija se ofendió con la respuesta, aunque con el paso de los meses entendió el punto de su madre.

“La abuela no debe criar a los nietos”, explicó al citado medio.

Fue así como, tiempo después, tomó una determinación clave en su vida, ya que vendió sus pertenencias y ahorró dinero de su jubilación para ir de viaje por el mundo.

Josefa ha viajado por varios países de Sudamérica, Norteamérica y Europa, aunque esto lo debió suspender debido a la pandemia.

Sin embargo, por ahora disfruta recorriendo destinos turísticos de su país, cuidándose siempre de no contagiarse de COVID.