Tito Loizeau y su hijo Gastón abrieron en junio del 2019 un restaurante temático de cine, inspirado en Hollywood de los años 30′. “El Capitán”, como se llama su negocio, se ubica en la ciudad de Buenos Aires, lugar que hasta hace sólo unos días tenía la prohibición de funcionamiento para locales no esenciales como el cine.
Una vez levantada esta restricción, Tito Loizeau decidió volver a reunir al personal con el cual trabajó por más de dos años y reabrir el cine temático. Sin embargo, al contactar a sus empleados, recibió una noticia que jamás esperó.
Y es que el hombre supo que sus trabajadores tenían empleos en otros lados. Puede que no parezca extraño, ya que no trabajaron en el cine durante 12 meses, pero Tito les pagó el sueldo de cada mes que no estuvieron presencialmente en el local.
“Después de 12 meses cerrados por la cuarentena, el gobierno decidió habilitar los cines. Así que reabrimos El Capitán. 11 meses pagando salarios de 20 personas. Ahora los convoco a trabajar y 14 de las 20 estaban laburando en otro lado. Pelotudo es poco lo que me siento!!”, publicó Loizeau en Twitter.
Después de 12 meses cerrados por la cuarentena, el gobierno decidió habilitar los cines. Así que reabrimos El Capitan. 11 meses pagando salarios de 20 personas. Ahora los convoco a trabajar y 14 de las 20 estaban laburando en otro lado. Pelotudo es poco lo que me siento!!!
— Tito Loizeau (@titoloizeau) March 2, 2021
“En 10 días vamos a llegar a un año cerrados. En ese momento teníamos 20 empleados. El que más antigüedad tenía llevaba cinco meses trabajando. El Gobierno no nos permitió despedir ni suspender y entramos en este proceso de ATP para pagar los salarios. Y así estuvimos hasta el año pasado que el gobierno dejó de pagar el ATP”, detalló Loizeau al medio Infobae.
“Yo no tenía ingresos y me hicieron pagar 11 meses un sueldo. Fue una avivada argentina (…) Nadie me mandó nada y me entero porque no quieren venir a trabajar porque ya están trabajando en otros lugares”, agregó.
Luego de esta situación, el empresario desconoce si volverá a reabrir el restaurante, ya que en este tipo de negocio el personal necesita de capacitación. “Se hace difícil poder reabrir el negocio en el corto plazo cuando al mismo tiempo existe la posibilidad de tener que cerrarlo en algunos meses por una nueva ola de Covid-19”, concluyó Tito Loizeau.
Ahora, buscará a nuevas personas que quieran unirse a su equipo de trabajo, con la incertidumbre que significa para él casi comenzar de cero.
