El abuso del alcohol en el país es uno de los mayores problemas a tratar por la salud pública. Uno de los factores que hace a la población nacional más propensa a ingerir este estupefaciente es la normalización que existe al respecto, por ello se hace necesario reconocer cuando existe un problema de consumo.

Según la Universidad de Chile, el consumo de alcohol es uno de los “problemas de salud pública más preocupantes en el país”, esto ya que “es bastante común su abuso y consumo excesivo”, afirma el académico de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas y experto en adicciones, Mario Rivera.

Esto se ve reflejado en la constante presencia de esta bebida en diversas celebraciones, en las que incluso en algunas se convierte en protagonista. Esto último suele traer consecuencias lamentables no solo para quien lo consume, sino que también para quienes lo rodean.

Según cifras del Ministerio de Salud del 2019, ese año más de 260.206 personas tenían un trastorno por alcoholismo.

Debido a lo usual de su presencia en reuniones y celebraciones, además de lo normalizado que está el consumo de este estupefaciente, puede ser difícil notar cuando hay un problema de alcoholismo.

Señales de alcoholismo

De acuerdo al director médico de Clínica Los Leones, Sergio Sánchez, hay tres características fundamentales de una persona con alcoholismo:

– Ser incapaz de limitar la cantidad de alcohol que se bebe.
– Tener la intención o voluntad de disminuir la cantidad de consumo o haberlo intentado sin éxito.
– Dedicar mucho tiempo a beber, a conseguir alcohol o recuperarse del consumo de alcohol.

No obstante, estos tres factores se enlazan con otros comportamientos propios de una persona que tiene un problema de consumo de este estupefaciente.

Según la médico de Nueva Clínica Cordillera, Sandra Aguilera, una persona con alcoholismo puede tener antojos intensos o ansias de beber; abandonar o limitar las actividades sociales, laborales y pasatiempos para consumir; y en casos más avanzados, poner la seguridad y la salud propia y de otras en riesgo.

Esto no es todo, la profesional detalla que quienes tienen problemas con el alcohol son incapaces de cumplir obligaciones importantes en el trabajo, en la escuela y en el hogar debido al consumo. Sumado a esto, cuando el nivel de consumo es muy alto, a pesar de que las personas tienen conciencia de que este perjudica su vida, no detienen el consumo.

Finalmente, el rasgo más significativo de una persona que está viviendo alcoholismo es cuando se desarrolla tolerancia y abstinencia, el primero quiere decir que se necesitan cantidades más grandes de estupefaciente para sentir su efecto.

Mientras que el segundo se da cuando el consumo de la sustancia se reduce o cesa y se desarrollan síntomas como náuseas, sudor y temblores.

Persona con problemas de consumo de alcohol sentado en el piso con botellas de cerveza vacias
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¿Qué cantidad y frecuencia de consumo de alcohol es riesgosa?

De acuerdo a Aguilera, un consumo riesgoso de alcohol son 5 copas en el caso de los hombres y 4 en las mujeres en dos horas.

No obstante, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU, un consumo excesivo comprende consumir 4 o más tragos en una sola ocasión. Si en el periodo de una semana son entre 8 (mujeres) o 15 (hombres) los tragos que se ingieren, también entran en esta categoría.

Si tienes problemas con el consumo de alcohol y otras drogas o conoces a alguien que los tenga, recibe orientación llamando al número 1412 de Senda. Este es un servicio gratuito, anónimo y confidencial, que funciona las 24 horas del día.