La falta de tiempo, el miedo y la obesidad son tres de las principales razones por las que las mujeres postergan su salud, lo cual se ve reflejado en su esperanza de vida en Chile, la cual bordea los 80 años.

En Chile, 7 de cada 10 nuevos casos de cáncer de mama se diagnostican en mujeres mayores de 50 años. Si el tumor se detecta de manera precoz, existe un 90% de probabilidad de mejorar el diagnóstico, dando gran relevancia a los exámenes de rutina, sin embargo, una gran porción de mujeres admite que los posterga, al igual que su salud por falta de tiempo y obesidad.

Así lo detalló la ginecóloga de Nueva Clínica Cordillera, Dania Acuña, “las pacientes tienden a postergar sus exámenes de rutina primero por tiempo”, esto ya que suelen priorizar la salud de los otros sobre la personal, además que comúnmente son las encargadas de cuidar a padres ancianos o hijos enfermos, explicó la profesional.

La segunda razón yace en que “hacerse el PAP -papanicolau- y la mamografía son exámenes desagradables. La mamografía puede doler, el papanicolau puede ser incómodo”, describe la ginecóloga sobre los métodos de detección temprana de cáncer de mama y de cuello cérvico uterino.

La obesidad, explica Acuña, también es una razón por la que muchas mujeres postergan su salud, esto ya que, “les causa miedo que las traten de obesas, de gordas o que las critiquen por su peso”, afirma acuña.

Los exámenes más evitados por las mujeres

De acuerdo a la profesional, los estudios que más evitan las mujeres son la mamografía, incluso “hay quienes no se lo han hecho nunca por miedo a que les duela”, aseguró.

El segundo más postergado es el mencionado PAP debido a la incomodidad que genera el método de detección por lo invasivo, explicó la ginecóloga.

Lo cierto, es que habitualmente se consulta al médico sólo cuando hay síntomas de enfermedad. Solo durante la pandemia, según el último Kaiser Family Foundation’s Women’s Health Survey, un 38% de las mujeres encuestadas aseguraron haber saltado o aplazado sus chequeos de salud preventivos anuales o rutinarios. Sin embargo, los chequeos preventivos pueden aumentar las expectativas de vida.

El hecho de tener más edad es un factor de riesgo para contraer enfermedades, tales como cáncer de mama, por eso la importancia de realizar exámenes de rutina sin la necesidad de presentar síntomas.

En Chile, las mujeres tienen una expectativa de vida que bordea los 80 años, sin embargo, cada ocho horas fallece una por cáncer de mama, siendo una de las principales causas de muerte en la población chilena.