¿Alguien se pondrá colorado con todo esto? ¿O será igual que con la Fundaciones y Corporaciones donde la repartija se recordará por décadas?

“Las comisiones de servicio en el país y en el extranjero deberán reducirse a las que sean imprescindibles para el cumplimiento de las tareas institucionales, especialmente aquellas en el extranjero, las que no podrán exceder de dos personas por actividad. Excepcionalmente, la Dirección de Presupuestos podrá autorizar al servicio una comisión de servicio mayor al número señalado, cuando le asistan motivos fundados”.

“Sólo el Presidente de la República y los ministros y las ministras de Estado en comisiones de servicio en el extranjero, podrán estar acompañados de comitivas. En el caso de las ministras y los ministros, estas comitivas estarán compuestas por un máximo de dos acompañantes, a excepción del Ministro o la Ministra de Relaciones Exteriores, a quien podrá acompañar un máximo de tres personas”.

No lo escribí yo. Es la regla establecida en la ley de presupuestos del año 2023 que replica casi sin modificaciones lo establecido en años anteriores. Pero en el Gobierno Regional del Biobío en el 90% de los viajes al extranjero estas reglas no se cumplen.

Finalizada la pandemia comenzó la temporada de viajes. Aquí algunos datos para tener una idea de cómo se utilizan sus impuestos. Entre paréntesis la comitiva.

El año 2022 hubo los siguientes cometidos: Barcelona (5), Boston (18), Egipto (3), Israel (9), País Vasco (3), País Vasco (2), Ecuador (2). El 2023 el asunto fue algo más masivo: Colombia/Brasil (10), Miami (1), País Vasco (14), Australia/Nueva Zelanda (26), España/Estonia (9).

Este año hay algunos viajes bien pintorescos. Por ejemplo, un viaje a Curitiba y Medellín para acompañar el proceso de Actualización de la Estrategia Regional de Desarrollo, un proyecto contratado a la Universidad de Concepción para el que viajaron al extranjero e “invitaron” a cuatro Consejeros regionales y a funcionarios del Gore y de Desarrolla Biobío.

Otro ejemplo es un viaje a España acompañando una gira tecnológica del proyecto denominado Basura Cero en la provincia de Arauco, proyecto contratado a CIPA, pero al cual también invitaron a tres Cores y funcionarios del Gore y de Desarrolla Biobío. ¿Para qué contratar a empresas externas para ejecutar diagnósticos o algún proyecto donde luego participan los mandantes (solo en los viajes)? ¿No será un gasto innecesario?

El ultimo, realizado por el Gobernador y una importante comitiva, es la denominada experiencia internacional de bomberos en la compra de carros y uniformes en España y Marruecos para poder enfrentar la próxima temporada de incendios en la región del Biobío, y lanzamiento internacional del mundial de Rally Chile Biobío en Estonia. Realizado entre el 14 y el 24 de Julio del presente año, los cinco consejeros regionales y cuatro funcionarios del Gobierno regional pasaron cinco días visitando un proveedor de material para bomberos y, posteriormente, otros cinco días en Estonia para ver la fecha del Rally Mundial en ese país.

Obviamente, invitaciones de por medio, la visita se justificó en la necesidad de estar allá y ver todos los detalles para aprender y que la fecha local fuera perfecta (los del Rally mundial poco saben de organización).

Este viajecito costó algo más de 70 millones de pesos, incluyendo pasajes de avión de 5,6 millones de pesos- promedio- para los funcionarios que viajaron, más viáticos y un anexo de 4,6 millones por transporte VIP en Estonia, para que el grupo pudiera llegar al lugar de los hechos.

A los que le gustan las comparaciones: en la mayoría de estos viajes el viatico diario de una autoridad es cercano a un sueldo mínimo mensual y el gasto total, por persona, puede llegar a lo que un trabajador logra ganar en un año.

¿Recuerdan ustedes el famoso BioBioWeek en que casi 80 personas viajaron a China con un costo superior a los 900 millones de pesos? La lista de irregularidades era enorme; hubo autoridades devolviendo viáticos y universidades justificando gastos.

Pero nada se aprende, y los viajes siguen siendo un derroche de tiempo y dinero. Viajan con viáticos millonarios que no se rinden y los saldos tampoco se devuelven. Y lo peor es que están convencidos que su presencia aquí o allá es absolutamente necesaria para lograr las metas y objetivos de la región.

¿Por qué nueve personas deben ir a Estonia a una fecha del rally Mundial? ¿Qué justifica un gasto de casi 8 millones de pesos por persona? ¿Qué rol cumplen los consejeros regionales en cada uno de estos viajes? ¿Por qué viajan funcionarios que nada tienen que ver con las actividades que se desarrollan?

Y las obras importantes siguen esperando.

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