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La Policía de Investigaciones, en conjunto con la Fiscalía de Alta Complejidad y Crimen Organizado Oriente, realizó un operativo en la población Los Quillayes, La Florida, donde se logró detener a siete personas -tres mujeres y cuatro hombres- por delitos relacionados con armas y drogas. Tras cinco meses de investigación, se decomisaron siete kilos de droga valuados en $40 millones, incluyendo cocaína, pasta base, marihuana dosificada y ketamina, además de un arma de fuego y municiones de guerra. Se destaca la complejidad de la operación debido a la infraestructura y cámaras de seguridad que la banda tenía en el sector. Dos de los detenidos quedaron en prisión preventiva, mientras que los demás esperan su control de detención.

Municiones de guerra, armas y drogas decomisó la Policía de Investigaciones en La Florida. En total, hubo siete detenidos.

El operativo fue ejecutado por funcionarios de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) La Florida de la PDI, junto con la Fiscalía Alta Complejidad y Crimen Organizado Oriente.

En total, se detuvo a tres mujeres y cuatro hombres, por su eventual responsabilidad en los delitos de infringir la ley de drogas y de armas. De ellos, seis son chilenos y uno es venezolano.

Luego de cinco meses de investigación, se logró identificar distintos puntos de venta de droga en la población Los Quillayes, los que finalmente fueron allanados.

Esto permitió la captura de los acusados, más la incautación de siete kilos de droga: cocaína, pasta base, marihuana dosificada y ketamina. Todo fue avaluado en $40 millones.

Además, se incautó un arma de fuego y munición de guerra.

El fiscal jefe (s) de la Fiscalía de Alta Complejidad Oriente, Ernesto Navarro, señaló que solo seis de los sujetos pasaron a control de detención y dos quedaron en prisión preventiva.

Por su parte, el subprefecto Gabriel Yáñez, jefe (s) de la Bicrim La Florida, destacó la complejidad de la operación, ya que “lamentablemente, producto de lo que es la infraestructura de ese sector (Los Quillayes), es muy difícil ingresar sin ser detectado”.

Esto se veía complicado aún más porque la banda contaba con cámaras de seguridad para detectar la presencia de posibles policías.