“No sé qué seguridad podemos tener ahora para vivir", afirmó una residente del edificio donde la tarde del martes ingresó una turba para saquear a agredir a un hombre en Alameda. La vecina aseguró que los manifestantes eran todos estudiantes y reconoció que sienten miedo de lo pueda pasar durante las manifestaciones que se registran cada viernes en Plaza Italia.

Una vecina del edificio donde ingresó una turba para saquear un departamento en Alameda, en el centro de Santiago, relató el accionar de los manifestantes y el temor que sienten que esa situación se replique este viernes.

Amanda, quien vive en el tercer piso del edificio, informó a Radio Bío Bío que venía llegando del trabajo cuando se encontró a la turba al exterior, momento que utilizaron los manifestantes para ingresar a fuerza a las dependencias.

Afirmó que la información que recibieron es que un hombre del quinto piso se mostró desnudo desde la ventana a los participantes de la marcha. Ante eso, comienzan a escuchar gritos como: “Hay que matar al violador y hay que sacar al violador”.

La mujer aseguró que los manifestantes “andaban con pistolas, tenían cuchillos”, precisando que se trataba de estudiantes, “eran puros niños chicos. Es impresionante la rabia que ellos tenía, cómo entraron, cómo hicieron tira ese departamento”.

Tras eso, añadió que bajaron al propietario desde el quinto piso al hall y entre una multitud de “entre 100 o 150 personas todos lo pisaban, todos le pegaban”.

La propietaria afirmó que por varios minutos llamaron a Carabineros, pero no llegó nadie hasta que las cámaras captaron a las estudiantes arrojando los muebles.

“Los carabineros no asisten, no van. Un niño de 12 o 13 años me amenazó a mí y no me llegaba ni al hombro (…) Ellos querían robar en la caseta del conserje y me amenazaron con un cuchillo. Cuando yo me puse a llorar y gritaba, y el mismo niño que me había amenazado me dice que ‘tranquila, tía, a usted no le vamos a hacer nada’”.

Agregó que los menores le robaron al conserje una mochila que tenía en la caseta y luego de dos horas del ataque volvieron a devolverle los documentos.

Por eso, indicó sentir temor que nuevamente ingrese una turba durante las manifestaciones del viernes. “Si vuelven, ¿Qué hacemos?”, se preguntó la mujer. “No sé qué seguridad podemos tener ahora para vivir. Es un edificio antiguo y se metieron, nos sacaron los extintores, nos rompieron todo lo que pillaron a paso (…) irrumpieron la vida privada de todos nosotros”.

Entre los propietarios afectados por las pedradas lanzadas desde el exterior, aseguró que hay una adulta mayor, quien les indicó que lo único que hizo fue rezar.

“Anoche no podía dormir, hoy estoy como un ente en mi trabajo y no sé si al llegar a mi casa van a estar mis cosas”. “No saben lo que es no dormir pensando que puede venir una turba porque ya vieron que el edificio es fácil de entrar y ¿Qué vamos a hacer?”, dijo con la voz quebrada.

Por esa sensación de inseguridad que afirmó sentir, emplazó a las autoridades a tomar medidas. “La alcaldesa tiene botado a Santiago, está todo sucio, hay delincuencia por todas partes. Las pistolas son como andar con una honda”, criticó.

Es preciso indicar que el gobierno y la Municipalidad de Santiago se querellaron en contra de los responsables del ataque al departamento.

La Fiscalía, en tanto, ya instruyó las primeras diligencias como tomar declaraciones a testigos y recabar imágenes del lugar.

Escucha la entrevista a continuación: