Una ong animalista denunció que Asmar prohibió a trabajadores alimentar a perros en el astillero de Talcahuano, donde hay canes que estarían en desnutrición. Apuntan a persecución laboral.
Agrupaciones animalistas denuncian que desde Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar) en Talcahuano, región del Bío Bío, realizan una persecución laboral a los trabajadores que alimenten a perros que viven en la planta, lo que está prohibido.
Una docena de perros abandonados han encontrado refugio en la Planta Asmar, donde, según relatan trabajadores, es costumbre que vivan los canes ahí y sean alimentados e incluso adoptados por los mismos funcionarios.
Sin embargo, la ONG Cordda Bío Bío denunció que en la última administración de la empresa se prohibió alimentar a los perros, lo que provocó un desgaste en los animales, que llegó a la desnutrición.
El primer aviso fue a través de un cartel que indica que el alimentar a los perros atrae a roedores y por eso no se debe, pero luego, enviaron oficios a trabajadores sorprendidos alimentando a los animales donde los sancionan por falta de respeto.
En uno de estos casos se le llama la atención a un trabajador, quien habría respondido de mala forma a un superior.
Nancy Figueroa, presidenta de la Corporación de Defensa de Animales Bío Bío, señaló que esto transgrede la ley 21.020 y ley cholito, por lo que presentarán una denuncia.
“La problemática es que hay una prohibición de alimentarlos, sabiendo que la ley 21.020 considera como maltrato animal por omisión el prestarle cualquier tipo de ayuda”, dijo Figueroa, quien aseguró que se reunieron con la empresa, desde donde dijeron que eliminarían la medida, pero que hasta ahora no lo han hecho.
De parte de la Planta de Asmar Talcahuano negaron la prohibición que impida alimentar a los perros que transitan diariamente por las instalaciones de la Planta Industrial.
Se han efectuado una serie de acciones sobre esta población canina, como coordinación con centros de mantención temporal de animales y centros de protección, a fin de que sean acogidos en un lugar adecuado, junto a la obtención de atención veterinaria, vacunación y esterilización, cumpliendo la normativa sanitaria, que permita una sana convivencia entre los trabajadores, proveedores, subcontratistas.
Agregaron que los perros que transitan libremente por el recinto del Astillero pueden seguir viviendo.
