En huelga se mantienen los trabajadores del Chiflón del Diablo en Lota, región del Bío Bío. Esto por diferencias salariales que generó conflictos con la administración.
El lugar se encuentra cerrado y con carteles que piden mejores sueldos. Los trabajadores cumplieron una semana y media de huelga exigiendo las mejoras.
Según expresó Daniel Sierra, guía del lugar, hubo una promesa de la Corporación que administra el lugar que no se ha cumplido.
De acuerdo a Sierra, les prometieron que cuando al lugar le fuera bien, esto se iba a ver reflejado en sus sueldos, situación de aún no se concreta.
La consecuencia es que decenas de personas que han querido desde la semana pasada ingresar al lugar, deberán postergarlo. Así le ocurrió a Alicia Guarelo, que viajó desde Santiago con sus hijos.
“Veníamos a conocer la mina, es la historia de Chile y hay que conocerla”, declaró la turista.
Los trabajadores insisten en que el flujo de visitantes, y el cobro de 9.300 pesos para el circuito completo o de 8.700 pesos sólo para bajar a la mina, no se condicen con los cerca de 30 trabajadores que ganan en su gran mayoría el sueldo mínimo.
18 años de trabajo en el Chiflón, Manuel Sánchez explicó que el recinto turístico atrae a una gran cantidad de visitantes.
“Para la temporada de octubre llegan 15, 20 buses y los atendemos todos […] Después llega la temporada de verano, si esto no para nunca”. declaró Sánchez.
Los trabajadores del clásico turístico de Lota solicitan un aumento del 13%, según indica el presidente del Sindicato Lota Sorprendente, Gastón Ramírez.
Sin embargo en las conversaciones con la Corporación Baldomero Lillo, que administra el circuito, se ofreció el 3,4% sobre el IPC para este año, lo que el director de comunicaciones, Mario Vera, insiste, tiene concordancia con los gastos operacionales y la realidad nacional.
Así, el Chiflón del Diablo se mantiene cerrado, y la Corporación se manifiesta dispuesta a seguir conversando pero sobre un reajuste más bajo. Por su parte, los trabajadores solicitan la mediación de Corfo y no descartan radicalizar la movilización de no obtener respuesta positiva a su demanda salarial.
