La Gobernación de Valparaíso finalmente autorizó el concierto de Slayer y Anthrax, programado para el martes 8 de octubre en el Sporting Club de Viña del Mar.
Lo anterior, tras la polémica decisión de productora de comenzar la venta de entradas y publicidad sin haber ingresado la solicitud de permiso previo al evento.
Por esta razón, la productora Lotus, la administración del recinto, la Superintendencia de Medio Ambiente, Carabineros, la Municipalidad de Viña del Mar y la Gobernación llegaron a un acuerdo, tras una reunión para zanjar el tema.
A su vez, los vecinos de la avenida Los Castaños valoraron que tanto la productora como las autoridades incluyeran su opinión en la decisión final de autorizar el evento.
Por su parte, la gobernadora María de los Ángeles de la Paz, entregó detalles en las medidas de seguridad que tomará la productora al momento del show, afirmando que esto incluirá -entre otras cosas- los planes de evacuación ante una posible emergencia.
Andrés Varnava, director de Producción de la Productora Lotus, señaló que se realizarán mediciones sonoras en las pruebas de sonido, entre otras medidas para evitar el impacto sonoro en las viviendas colindantes al recinto.
Quien también se refirió a este evento, fue la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, la que expresó que la ciudad tiene que someterse a estos shows, pero con las mínimas molestias para los vecinos.
El aforo acordado es de 5.000 personas, sumado a que además de la prueba de sonido con la participación de vecinos -para medir el volumen- se comprometió una reunión de evaluación post evento, para verificar que se haya cumplido con los acuerdos y ver qué situaciones se pueden mejorar para futuros shows que se puedan desarrollar en una próxima oportunidad.
