Una de las asociaciones de funcionarios de la Seremi de Salud presentó ante la Contraloría General una solicitud para investigar acusaciones de acoso laboral en la oficina provincial de Rapa Nui, las que apuntan en contra de un encargado de departamento.
Los trabajadores acusan que el profesional acusado fue enviado desde el continente por el seremi de Salud, Francisco Álvarez, y se desempeña como jefe de un área, aunque incluso ha sido el encargado subrogante de la oficina.
Apuntan que ha hecho mal uso de las camionetas fiscales, sumado a malos tratos, intentos de dividir a los compañeros y -en particular- hacer que una trabajadora embarazada hiciera fiscalizaciones a pie por la isla, mientras él utilizaba un vehículo del estamento.
En octubre de 2018 esta situación fue informada al seremi de Salud, por lo que comenzó una investigación sumaria. Debido a esto, la asociación apuntó al jefe de administración y finanzas, Leonardo Marillanca, porque el líder de la cartera a nivel regional le delegó averiguar las acusaciones.
Janet Santibáñez, presidenta de la Afussav, dijo que el remedio fue peor que la enfermedad, porque en el sumario fueron reveladas las identidades de los denunciantes.
Debido a esto, contó a Radio Bío Bío que el clima laboral en la oficina de Rapa Nui empeoró aún más.
Los trabajadores plantean que Marillanca tiene una incompatibilidad para haber llevado el proceso, porque como jefe de administración se le entregó una responsabilidad de encargado de relaciones laborales, lo que llevó a conducir una investigación que los funcionarios calificaron como dañina.
La Asociación de Funcionarios criticó lo que calificaron como lentitud y falta de constancia del seremi Francisco Álvarez.
Por ellos, Santibáñez planteó incluso que no es la primera vez que hay un mal manejo de conflictos internos en esta administración, lo que para ella demuestra que sólo presionando se logran avances.
Además, dicen temer represalias, añadiendo que los funcionarios en Rapa Nui son muy valiosos, porque en el territorio insular es muy importante que quienes trabajan ahí conozcan la zona y formen parte de su cultura, por lo que les asusta perder a los trabajadores que realizan las fiscalizaciones en salud.
