Los técnicos paramédicos, auxiliares y enfermeras del Hospital Carlos Van Buren se mantienen movilizados en una manifestación por el colapso y la crisis estructural del recinto de salud.

Acusan que todos los inviernos es la misma historia: faltan camas, se colapsa el área de urgencias y las metas para terminar con las listas de espera dificultan la atención.

Aseguran además que no es sólo un problema del Van Buren sino que de toda la red hospitalaria.

Raúl Delgadillo, dirigente de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats) en el Van Buren, indicó que se mantienen los turnos éticos, y que entiende que el problema supera a la dirección del hospital.

Dicen que el Gobierno sabe del problema, tras la visita inspectiva del ministro de Salud, Emilio Santelices.

Un ascensor, máquinas de imagenología y hasta una central de alimentación no están funcionando, mientras que tanto la posta infantil como la de adultos están superadas.

A partir de esto, los dirigentes se reunieron con el intendente regional, Jorge Martínez, y la presidenta de Fenats unitaria en Valparaíso, Cecilia Alday, dijo que la autoridad se comprometió a invertir recursos y a volver a reunirse con los funcionarios.

El propio intendente Jorge Martínez indicó que el Ministerio de Salud ya está al tanto de la problemática, y que espera una carta formal de los dirigentes para hacerla llegar al gobierno central.

El fallecimiento de la pequeña Amelia ocurrido en el Hospital el pasado 4 de julio confirma el problema de fondo.

Los dirigentes dicen que producto del colapso de la red hospitalaria de la zona, los otros centros de salud tampoco tienen disposición para trasladar camas al Van Buren.

Dicen que las clínicas no cuentan, porque solamente pueden pedirles camas de baja complejidad, para casos de pacientes que no se encuentran en ningún estado de gravedad.

Producto de las situaciones de colapso y el caso del fallecimiento de Amelia, el ministerio de salud comprometió un paquete de inversiones de $1.600 millones de pesos, además de la entrega de un edificio de la Universidad de Valparaíso para trasladar áreas administrativas y aumentar el espacio del recinto.