A dos meses de la implementación del decreto comunal que impartiría multas a peatones que compraran en el comercio ambulante en Valparaíso, la alcaldesa Virginia Reginato reconoció no contar con cifras de la gente multada, además de indicar la complejidad de emprender ese tipo de acción preventiva.

En el desglose, la ordenanza sancionaría con multas de hasta $235 mil -equivalentes a 5 UTM- a quienes compren en el comercio ambulante.

Según señalaron concejales y autoridades de Carabineros en su promulgación, la idea inicial era frenar la oferta y la demanda, además de descongestionar el tránsito por la calle Valparaíso.

“No hay cifras pero por supuesto no ha sido fácil“, dijo la alcaldesa, y sostuvo que “estamos trabajando fuertemente con los inspectores municipales y con Carabineros de Chile, pero parece que los ambulantes también vienen a veranear en Viña del Mar”.

En la misma línea, el concejal Víctor Andaúr indicó que la dificultad operativa de fiscalizar la compra en el comercio ambulante radica en la cantidad de gente que circula por las calles, y que más allá de tomar medidas punitivas el incentivo debe ser al cambio cultural.

El municipio de Viña del Mar indicó que la medida está siendo evaluada, considerando que su implementación es temporal, sin descartar en su momento que la ordenanza que multa a los peatones pueda ser permanente.

La acción fue respaldada por la gobernación provincial de Valparaíso y la prefectura de carabineros de la ciudad jardín.