Hasta la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) concurrieron dirigentes de La Asociación Nacional del Servicio de Aduanas (Anfach), de la Agrupación de Empleados Fiscales (ANEF) y de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para presentar una queja por prácticas antisindicales contra el Estado de Chile.
Marcelo Reyes, presidente de la Anfach, acusó ante el ente internacional que el Gobierno desconoce acuerdos comprometidos, lo que se suma a la denuncia de un uso excesivo de la fuerza pública en el marco de las movilizaciones del pasado 24 de mayo.
El dirigente aseguró que llegarán hasta las últimas consecuencias para que se rechacen medidas como la aplicación de descuentos sin proceso, apreciación de demerito a las jefaturas que apoyaron la movilización y amenazas de despidos -que asegura- levantó la Subsecretaría de Hacienda bajo el conocimiento de la Dirección del Servicio.
Los dirigentes sindicales fueron recibidos por Carlos Rodríguez, especialista en Actividades con los Trabajadores del organismo internacional, quien explicó que serán los mecanismos de control los encargados de demandar al Gobierno de Chile.
Mientras la OIT lleva a cabo este proceso, los dirigentes adelantaron que no caerán en las provocaciones de las autoridades, por lo que seguirán respetando la mesa de negociación establecida con el Gobierno y que -aseguran- fue solicitada por el mismo ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.