La comunidad educativa de Chaitén se tomó el colegio Juan José Latorre, emplazando al Gobierno para agilizar la reposición.
Goteras, hacinamiento, falta de calefacción y mal estado de la infraestructura, fue parte de lo que denunciaron.
El recinto educacional, reabrió sus puertas tres años después de la erupción del volcán con cerca de 150 alumnos, sin embargo, hoy la matricula supera los 400 estudiantes.
Ingrid Quiñones, directora del recinto, detalló los problemas que enfrentan a diario, indicando que el alumnado debe soportar “el deterioro de la infraestructura, evidenciado en hacinamiento, espacios de estudio (…) Salas y oficinas insuficientes”.
Carola Pérez, dirigenta del Centro de Padres y Apoderados, ahondó en el petitorio de ocho puntos donde emplazan a los ministerios de Educación y Desarrollo Social, además del intendente Harry Jürgensen.
Estudiantes y apoderados, manifestaron que la toma del recinto se extenderá hasta tener una respuesta de las autoridades regionales, esperando tener novedades sobre la reposición del establecimiento y certezas sobre el nuevo edificio.
