A tres días de su inicio se mantiene el rechazo a la consulta indígena por un nuevo sistema de tierras, propuesto por la Comisión Presidencial Por La Paz y Entendimiento, con el objetivo de encontrar una solución al conflicto que se vive en la macrozona sur.

La consejera nacional mapuche ante la Conadi, Ana Llao, calificó la consulta indígena por un nuevo sistema de tierras como una “invasión moderna” y llamó a rechazar el proceso que lidera el Gobierno.

Para establecer este nuevo mecanismo de reparación se plantea “armonizar” la Ley Indígena, pero además la instancia manifestó la idea de celebrar contratos de usufructo, arrendamiento y otros contratos de mera tenencia sobre tierras de comunidades y personas mapuche.

Para la consejera nacional mapuche ante la Conadi, Ana Llao, la consulta se trata de una “invasión moderna” porque se pretende modificar la Ley Indígena.

Y es que la actual Ley Indígena, en su artículo 13, establece que las tierras que gozan de esta calidad “no podrán ser enajenadas, embargadas, gravadas, ni adquiridas por prescripción”.

Mientras que el artículo 20 b permite financiar un mecanismo para dar solución a la demanda de tierras.

Según las autoridades de Gobierno y quienes lideran la consulta indígena, lo que se pretende es un “complemento a la norma” y no un cambio.

De acuerdo a la Comisión presidencial para la paz y Entendimiento, se necesitan unos 4 mil millones de dólares para responder a la actual demanda que mantienen comunidades ante la Conadi.

En tanto, la consulta indígena por un nuevo sistema de tierras se encuentra en su primera etapa de planificación y los encuentros continuará la próxima semana en distintas comunas de la Macrozona Sur.