El dueño de un camping en Tongoy, en la región de Coquimbo, fue formalizado por el homicidio frustrado contra un joven que se encuentra grave, tras dispararle con una escopeta el fin de semana de Fiestas Patrias.

En la audiencia de formalización se decretó arresto domiciliario al imputado, en virtud a sus atenuantes de responsabilidad penal y por no ser considerado un peligro para la sociedad.

Discusión y disparo

Los antecedentes fueron relatados por el fiscal jefe de Coquimbo, Claudio Correa, en la audiencia conocida por la jueza Carolina Baroncini, del Juzgado de Garantía de Coquimbo.

Según él, el domingo 19 de septiembre, en el camping Ripipal, del balneario de Tongoy, comuna de Coquimbo, Richard Pinto (65), dueño del recinto, disparó contra Cristóbal Ariztía, joven capitalino de 21 años y estudiante de Ingeniería Comercial.

Según la investigación, Ariztía, una vez que llegó al lugar le impidieron el ingreso, argumentando que el recinto se encontraba completo, por lo que intentó entrar por otro lado al lugar.

En ese momento se encontró con el dueño, quien ejecutó un primer disparo al aire y posteriormente tras un forcejeo, en un segundo disparo.

Según se señaló en la audiencia, fue el imputado el que llamó a Carabineros para denunciar lo sucedido.

Adicionalmente se agregaron las declaratorias de un amigo que acompañaba a la víctima, que reconoció que ingresaron al camping por un agujero en el cierre perimetral.

En las conclusiones también se consideró las declaración de la hija del imputado, quien señaló que su padre, en un llamado telefónico le contó que, “se pasaron unos niños y sin querer les disparé”.

Cristóbal Ariztía, fue ingresado para una urgente intervención quirúrgica en el Hospital de Coquimbo, debido a las graves lesiones que sufrió. Finalmente fue trasladado hasta la Clínica Alemana en Santiago, donde sigue luchando por su vida.

Arresto domiciliario

En definitiva ,el dueño del camping fue formalizado por homicidio frustrado tras dispararle con una escopeta. El tribunal decidió decretar arresto domiciliario total, en virtud de sus atenuantes.

El dictamen se basó en la autodenuncia del imputado y que entregó atención a la víctima. Además consideró que “éste no representa un peligro”, para la sociedad.

El abogado de Richard Pinto, Raúl Castillo, recalcó que su defendido “tiene una irreprochable conducta anterior y ha colaborado con el esclarecimiento de los hechos”.

Sobre la posibilidad de apelar a la legítima defensa, Raúl Castillo indicó que “nosotros no la hemos mencionado. No es nuestra tesis o estrategia en una etapa tan primaria de la investigación”.

Se instruyó al Laboratorio de Criminalística de Carabineros y la SIP, para recabar todos los antecedentes necesarios.