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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

En el Concejo Municipal de Antofagasta se vivió un tenso debate por la solicitud de una nueva patente de alcoholes en Parque Brasil, desatando enfrentamientos entre concejales y vecinos preocupados por problemas como ruidos y desórdenes. La discusión se caldeó cuando el concejal Dinko Rendić lanzó una expresión despectiva, generando malestar. Finalmente, la patente no fue aprobada, resaltando la necesidad de mayor fiscalización municipal.

Una acalorada discusión marcó la sesión del Concejo Municipal de Antofagasta del martes, mientras se abordaba la solicitud de una nueva patente de alcoholes en el sector Parque Brasil. La instancia terminó con fuertes cruces entre concejales y vecinos, luego de que el concejal Dinko Rendić sostuviera una expresión subida de tono mientras se debatía el tema.

El origen del momento ocurre cuando representantes de la Junta de Vecinos “Estadio Regional” manifestaron su rechazo a la apertura de un nuevo local con venta de alcohol en las inmediaciones de Avenida O’Higgins y Parque Brasil. Según señalaron, la presencia de estos recintos ha generado ruidos, riñas y desórdenes, afectando su derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación.

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Tras la intervención de los vecinos, el debate se tensó cuando el concejal Dinko Rendić —según quedó registrado en la transmisión oficial— expresó “me importa un pico esa hueá”, cuando uno de los vecinos expresaba que defienden su derecho a vivir de forma tranquila y sin afectaciones a su entorno.

Posteriormente, el alcalde y el propio concejal Rendic pidieron orden en la sesión. Luego ofreció disculpas por sus palabras, señalando que su intención no fue faltar el respeto.

La votación finalizó sin aprobar la patente: tres votos en contra, dos a favor y cinco abstenciones. La mayoría de los ediles argumentó la falta de antecedentes y coincidieron en la necesidad de fortalecer la fiscalización municipal sobre las patentes de alcoholes, advirtiendo que sin denuncias formales podrían exponerse a acciones legales de los solicitantes, como ya aconteció en el pasado con un club nocturno en la zona.

Desde el municipio se indicó que el local corresponde a un restaurante —y no a un bar ni club nocturno— y que sus propietarios ya administran otros negocios sin antecedentes negativos.

No obstante, la solicitud no prosperó por falta de quórum y se espera que el tema vuelva a ser revisado en una próxima sesión del Concejo Municipal.

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