La creación de un Ministerio de Seguridad Pública, la Defensoría de las Víctimas o la ley de inteligencia son algunos de los proyectos que se encuentran pendientes.

Parlamentarios no descartan suspender el receso parlamentario para tramitar de forma extraordinaria iniciativas que integran el fast track en materia de seguridad.

31 proyectos de ley forman parte del llamado fast track legislativo para hacer frente a la grave crisis de seguridad que vive nuestro país. Y tanto el Gobierno como el Congreso se comprometieron a aprobar todas las iniciativas para fines de 2023.

Sin embargo, al dar el balance legislativo de ese año, el presidente de la Cámara Alta, el senador UDI Juan Antonio Coloma, informó que se lograron despachar 22 proyectos, lo que representa un 70% de dicho fast track legislativo.

Entre las iniciativas aprobadas se encuentran la ley Naín-Retamal, Ley Marco sobre Ciberseguridad, la ley que sanciona los actos preparatorios de sicariato y la Ley de Usurpación, entre otros.

Pero hay importantes iniciativas pendientes, como la creación del Ministerio de Seguridad Pública, la Ley de Inteligencia, Ley sobre Reglas del Uso de la Fuerza, la creación del Servicio de Acceso a la Justicia y la Defensoría de las Víctimas, y la Ley de Infraestructura Crítica.

Sobre esa base, y considerando el estado de delincuencia en el país, y la reciente sesión del Consejo de Seguridad Nacional, se ha generado un debate por la necesidad de suspender el receso parlamentario y tramitar de forma extraordinaria las iniciativas que se enmarcan en la agenda de seguridad.

Para el diputado de Amarillos, Andrés Jouannet, miembro de la comisión de Seguridad Ciudadana, se trata de un debate demagógico, y subrayó que, para combatir la inseguridad, no se requieren más sesiones sino mayor eficiencia en la tramitación.

Menciona, entre otros, el caso de la Ley de Inteligencia, que, dice, llevan dos años esperando que el Gobierno le dé suma urgencia.

El senador independiente Kenneth Pugh, miembro de la comisión de Defensa Nacional, aseguró que durante febrero su equipo estará trabajando en la preparación de indicaciones legislativas y delineó sus prioridades en materia de seguridad.

Por su parte, el senador de Revolución Democrática, Juan Ignacio Latorre, advirtió que los proyectos son complejos, que no deben ser abordados en una lógica de fast track de fácil despacho, dado que buscan generar consenso y trascender el Gobierno de turno.

Con todo, el parlamentario confirmó estar a disposición para tramitar de manera extraordinaria si es necesario.

No hay claridad respecto a cuándo se despachará definitivamente las iniciativas pendientes, algunas de ellas consideradas como pilares de la agenda de seguridad, como la creación del ministerio homónimo o la Ley de Infraestructura Crítica, una materia que, de hecho, fue abordada por el Consejo de Seguridad Nacional.

Lo cierto es que muchos de estos proyectos se encuentran todavía en comisiones legislativas, en discusión de indicaciones, y otros en etapas de tramitación que impiden que las iniciativas puedan ser votadas en Sala o por el pleno, para ser despachada como Ley de la República.