"Si los tacos superan las dos horas o son de más de tres kilómetros se podrán evaluar levantamientos de barreras", dijo el ministro de Obras Públicas al detallar el plan de La Moneda para no volver a vivir lo ocurrido en Camarico, el 14 de abril, cuando un choque interrumpió el flujo en la Ruta 5 Sur por 12 horas y la fila de autos detenidos alcanzó los 30 kilómetros.

La mañana de este viernes el Gobierno anunció y detalló su plan para evitar tacos de magnitud durante el fin de semana largo, medida que considera el levantamiento de barreras en peajes.

Eso lo dijo desde La Moneda el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García.

“Los peajes, que también son puntos de congestión, tenemos desplegada la máxima capacidad y, eventualmente, si los tacos superan las dos horas o son de más de tres kilómetros se podrán evaluar levantamientos de barreras”, indicó.

El plan también contempla que si un atochamiento cumple dos horas se rompan las medianas, las divisiones que dividen un sentido y otro en cada carretera, para gestionar desvíos por rutas anexas.

García dijo que la planificación realizada ya identificó qué caminos se pueden ocupar.

En caso que la congestión se alargue y se transforme en una situación grave, el Gobierno también aseguró que se habilitarán servicios de agua potable y baños.

Junto con ello se le exigió a las concesionarias a mantener una comunicación continua con las autoridades y la ciudadanía.

También tendrán que tener maquinaria desplegada en rutas para “tomar decisiones rápidas, moviendo autos para reponer (el flujo vehicular)”, agregó García.

El gigantesco taco que motivó una mejor coordinación

En el punto de prensa el ministro de Obras Públicas fue consultado por el taco de 12 de horas que hizo noticia el jueves 14 de abril.

Un choque múltiple en Camarico cortó la Ruta 5 Sur y dejó ocho lesionados, con una fila que llegó a los 30 kilómetros.

“Descartamos que eso vaya a suceder porque cuando asumimos el Gobierno asumimos que había planes de contingencia solamente frente a accidentes y eso es lo que cambiamos”, partió.

“Lo que estamos haciendo es abordar y preocuparnos de todas las personas que están en la carretera”, agregó.

Ese 14 de abril el propio García reconoció ante la ciudadanía que hubo problemas de coordinación y que esta fue deficiente.

“No basta con haber respondido a estas horas a ese plan de contingencia, sino que necesitamos mejorar aquellas cosas donde la coordinación de los organismos públicos no estuvo a la altura de lo que la ciudadanía requiere”, sostuvo.

A partir de ese mismo día la Subsecretaría del Interior comenzó a trabajar en una mejora a los protocolos de respuesta, lo que involucró a Carabineros, los delegados presidenciales e incluso al Ministerio Público.

400 mil autos saldrán de la RM

Antes de García habló justamente el número dos de Interior, Manuel Monsalve.

La autoridad cifró en cerca de 400 mil los vehículos que saldrán este fin de semana largo de la región Metropolitana.

En la cita previa al punto de prensa el Gobierno se reunió con los delegados presidenciales, los generales jefes de zona y los seremis de Obras Públicas entre Atacama y Los Lagos.

La coordinación, aseveró, apuntará a asegurar que los chilenos “tengan la seguridad que el Gobierno y las instituciones van a actuar con oportunidad” ante una emergencia vial.

En concreto, el objetivo de la coordinación fue desarrollar mecanismos de anticipación y de acción frente a fenómenos que bautizaron como “emergencias de congestión vial”.

“Las familias chilenas van a vivir en los días que vienen dos fines de semana largo y se van a desplazar a otros lugares de Chile a ver a familiares”, dijo Monsalve.

“Sabemos que las familias toman los fines de semana largos para descansar, reencontrarse. Como Gobierno queremos dar seguridad a este proceso y por eso tomamos una lógica distinta a cómo se abordan estas emergencias”, complementó García.

Este 21 de junio corresponde al Día Nacional de los Pueblos Indígenas y el 27 el mundo católico celebrará a San Pedro y San Pablo.