Agrupaciones de familiares de los detenidos durante el Estallido Social se manifestaron a las afueras de la sede de trabajo del Presidente electo Gabriel Boric, instándolo a pronunciarse sobre la aprobación del proyecto de indulto.

Fue justo en medio de la llegada del presidente electo, a su sede de trabajo en Providencia, que manifestantes por la libertad de los denominados presos políticos de la revuelta desplegaron lienzos y consignas solicitando ser recibidos por el futuro mandatario.

Pese a que no lograron hablar directamente con Gabriel Boric, si fueron recibidos por sus asesores, quienes comprometieron un diálogo en los próximos días y reiteraron el compromiso con el proyecto.

Una de las integrantes del grupo de apoyo a los detenidos, Paula Denis, afirmó que el futuro mandatario debe pronunciarse para apurar el proyecto de indulto,
antes de que se instale la del Congreso.

Solicitud que surge a propósito de la nueva composición del Congreso y los obstáculos que sortearía el proyecto a partir de marzo.

El senador independiente Pedro Araya, presidente de la Comisión de Constitución, se reunió con el equipo político para trabajar prioridades legislativas y
afirmó que tal como está, el indulto no cuenta con los votos de la derecha y corre riesgo de ser archivado.


La integrante del equipo político del presidente, Izkia Siches, dijo que están trabajando para que se apruebe el proyecto y que hay una persona encargada de mantener el diálogo con las agrupaciones sociales.

Durante la próxima semana podría ponerse en tabla para avanzar en su tramitación, aunque deberá recibir algunas indicaciones y equilibrar exigencias. Se buscará su despacho en los términos que sea posible, ya que de ser rechazado podrá retomarse solo después de un año.