Una “doble rendición” de una compra de carros adquiridos en el extranjero desató una crisis en Bomberos. Hasta hoy se confirmó el despido del gerente general de la institución, quien es individualizado como responsable del error, una millonaria indemnización, una investigación interna y lo que es más delicado para la misma Junta Nacional de la entidad: “Se pone en riesgo la imagen institucional”, dice Raúl Bustos, líder nacional bomberil.

Preocupación y dolor hay en Bomberos de Chile debido a un “error administrativo” en la rendición de cuentas de la compra de carros en el extranjero y que derivó en el despido del histórico gerente nacional de la institución, Luis Erpel, ante una observación de la Subsecretaría del Interior, organismo encargado de revisar que los recursos estatales que se entregan a la institución sean bien invertidos.

Despedirlo implica pagarle una indemnización millonaria, ya que se empina por sobre los 170 millones de pesos, por sus 28 años de servicios.

Así se confirmó en las últimas horas, luego que el fin de semana pasado se reuniera la Junta Nacional de Bomberos y decidiera la marginación de Erpel, el 25 de abril, para despejar cualquier sombra de duda respecto de los dineros que le son entregados cada año en la Ley Nacional de Presupuesto de la Nación.

De acuerdo a lo informado por el presidente nacional, Raúl Bustos, la determinación obedeció a que se hizo una rendición por el total de una compra de “material mayor” fuera del país ante el Ministerio del Interior, sin embargo, ello no correspondía, debido a que 7 carros bombas se habían adquirido en parte con dineros nacionales -de Interior-, pero también con recursos propios de la institución, provenientes de la Junta Nacional, y también del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR).

En resumen, la observación fue porque la compra no correspondía ser cubierta solo con recursos de la cartera, sino que había dineros de otras fuentes: el FNDR y también de la institución. Hubo una especie de “doble rendición”.

Así lo precisó el presidente nacional de Bomberos, Raúl Bustos, quien en conversación con BioBioChile aseguró que su institución debe alejarse de cualquier situación que le pueda significar un desmedro a su imagen que es “estar con la comunidad en el combate de incendios”.

“Esto es tan grave que se decidió la salida del gerente”, dijo Bustos.

Indemnización millonaria

Junto con el despido se acordó la creación de una comisión externa que revisará las cuentas de la institución, cuya indagación cubrirá los últimos cinco años.

“Dejaremos en manos de la comisión para que investigue y pueda determinar si esto es algo absurdo o no”, dijo literalmente Bustos, en su presentación ante la Comisión de Bomberos, la tarde de este martes en la Cámara, donde fue citado a aclarar la situación.

Una de las situaciones que despertó el interés crítico de los diputados asistentes a la comisión, como la diputada del FA, Maite Orsini, fue el monto de la indemnización que se le debería pagar al ahora exgerente general, por su despido.

Pese a que Bustos no quiso detallar la cifra exacta, explicó que Erpel obtenía un sueldo que se empinaba a los 6 millones de pesos mensuales.

El gerente estuvo ligado a Bomberos por 28 años, desde 1993, lo que significa que el monto se aproxima a los 170 millones de pesos.

Lo anterior, debido a que su contrato tenía una clausula especial desde 2014, cuando Erpel asumió el cargo gerencial, donde se estableció que en caso de despido se le reconocería la totalidad del tiempo en la institución para efectos del pago indemnizatorio.

Sobre la causal de despido, Bustos explicó que en 2014 se modificó la figura gerencial en Bomberos y eso significó la creación de la gerencia general, similar a la que se usa en cualquier empresa, con las atribuciones respectivas, pero bajo la tutela del directorio de Bomberos.

“Este error no se acepta. Hasta ahora no tenemos una responsabilidad penal en esta materia, por tanto la causal de despido es perdida de confianza, que está establecido el articulo 161 del Código del Trabajo, que es el desahucio”, dijo Bustos ante la comisión de Bomberos de la Cámara de Diputados.

En su contrato se estableció que no tendría tope, ni por año ni por monto. “Tenemos que pagar el finiquito completo. Es una suma considerable”, comentó Bustos.

BioBioChile intentó obtener la versión de Luis Erpel, sin embargo, declinó phablar, por ahora.

¿Qué pasó?

Para entender lo que ocurrió en Bomberos debemos remitirnos a la Ley Nacional de Presupuestos.

Por medio de la ley que aprueba el Congreso, la institución recibe cada año alrededor de 46 mil millones de pesos para su funcionamiento.

Las glosas en que subdivide ese aporte son: para el funcionamiento de la Junta Nacional, operaciones bomberiles (monto que llega a cada una de las 313 cuerpos del país que deben rendir), glosa en moneda extranjera, glosa en moneda nacional y glosa de capacitación.

“Hasta ahora, hemos recibido la aceptación de tres glosas: capacitación, Junta Nacional y moneda nacional”, dijo el presidente.

En la glosa “Moneda Extranjera” es donde se advirtió el problema.

“La adquisición de material bomberil se hace a proveedores, través de contratos marcos, que se licitan a través del Ministerio del Interior. Las empresas que proveen los carros bombas o material mayor son empresas extranjeras, a las cuales se les paga con moneda extranjera, por eso la glosa se llama así”, dijo Bustos.

A renglón seguido, indica que “el Estado de Chile coloca un fondo anual de 8.500 millones de pesos para poder adquirir este material. Con ese monto, alcanzan muy pocos carros bombas, por tanto, tenemos que apelar a otras formas de inversión. Financiamiento propio, municipales, de gobiernos regionales para financiar estas bombas con distintas vías”.

“La glosa en Moneda Extranjera nos permite ir en cofinanciamiento de la adquisición de material mayor. ¿Cuál fue el error? En vez de imputar lo que se cofinancia se imputó la factura completa. Eso fue observado y nosotros tenemos que solucionar el problema”, explica Raúl Bustos.

¿Imagen dañada?

“Lo que aceptamos es que el error, el cual haya sido absurdo o no, será determinado por la investigación, y por eso tomamos las medidas correspondientes”, dijo el líder nacional bomberil, apuntando a la salida del gerente general y al inicio de las indagatorias.

Sobre si esto afecta la imagen de la institución, Bustos señaló que “es un efecto que tiene que sancionar la ciudadanía, lo único que digo es que lo estamos detectando oportunamente y solucionando rápidamente”.

“Es un tema de responsabilidad. Soy responsable por la marcha institucional, si bien es un error, y hay que ver cómo se produjo, pero hay situaciones y yo no puedo admitir esta clase de errores. Entendemos lo duro de ella, se trata de un funcionario con 28 años de labores en Bomberos de Chile, pero lógicamente, un error de esta naturaleza, aunque sea un monto menor, está institución tiene una imagen que no puede poner en riesgo”, cerró Bustos.

En cuanto a si recurrirán judicialmente a través de una denuncia al Ministerio Público para dar cuenta de esta eventual irregularidad, aseguró que “hay que ver, pero, primero no se está afectando ningún recurso fiscal. Cuando una institución tiene estas situaciones administrativas, lo que tiene que hacer es solucionarlas, que no se produzca ninguna clase de ilícito; si ello hubiera pasado, estaríamos en otras condiciones”.

Desde la Subsecretaria del Interior señalaron a BBCL que se trata de una situación interna de la entidad, por lo que declinaron responder preguntas, mientras Bomberos trabajan para apagar este incendio en su propia casa o en su caja.

Para el martes de la próxima semana quedó citado, de nuevo, a la comisión de Bomberos de la Cámara Baja, Raúl Bustos, para dar cuenta de los avances de la indagación interna.