Como una barrera que impedirá la participación indígena fue calificada desde Enama la reforma de escaños reservados para pueblos originarios en la Convención Constitucional.

Aunque algunas organizaciones indígenas y el mundo político valoraron la medida, las principales críticas de esta organización mapuche apuntaron a los requisitos para inscribir candidaturas y también para confeccionar el padrón especial.

Esto porque cada persona que desee apoyar a un candidato con su firma antes debe acreditar su calidad indígena en la Conadi, lo que se suma al proceso de identificación de votantes por parte del Servicio Electoral que se hará en base a diversos registros estatales.

Para competir por un escaño se debe contar con el patrocinio de tres comunidades o cinco organizaciones – también acreditadas – lo que forma parte de una serie de condicionantes que fueron detallados por el diputado Ricardo Celis (PPD).

Lo anterior fue criticado por el presidente de la Corporación de Profesionales Mapuches, Hugo Alcamán, quien manifestó que – tomando en cuenta los plazos – se dificulta la participación.

El pueblo mapuche tendrá siete de los 17 escaños, por lo que aquellas personas que quieran integrarlos deberán cumplir con el criterio de paridad.

Esto significa que además de su nombre deberán presentar un candidato suplente del sexo opuesto para que en caso que un género quede sobrerrepresentado se corrija con los reemplazantes.