Cerca del medio día de este martes parlamentarios de oposición firmaron y presentaron la Acusación Constitucional en contra del Presidente Sebastián Piñera.

Firmaron los diputados Carmen Hertz (PC), Camila Vallejo (PC), Jaime Naranjo (PS), Emilia Nuyado (PS), Jorge Brito (RD), Claudia Mix (Comunes), Tomas Hirsch (PH), Gael Yeomans (CS), Esteban Velásquez (FRVS), Vlado Mirosevic (PL) y Carolina Marzan (PPD).

Este escrito es uno distinto al que fue patrocinado por Pamela Jiles (PH), pues existieron diferencias internas que motivaron a desechar esa acusación, impulsando de esta forma al espectro de oposición a sumarse al escrito presentado por el Partido Comunista.

La diputada Carmen Hertz (PC) señaló que la acusación se presenta a raíz de “las graves, reiteradas, generalizadas y sistemáticas violaciones a los derechos fundamentales de las personas ejecutadas por agentes del Estado en el último mes”.

Asimismo, indicó que “esta situación ha infringido claramente la Constitución y las leyes y así lo señalamos en un argumento sólido y responsable en esta acusación”.

Agregó que “no es posible que en este país se siga con la impunidad política, con la impunidad moral, con la impunidad social, que ha sido (una) parte muy importante que ha detonado las manifestaciones sociales”.

Por su parte, el diputado Jaime Naranjo (PS) manifestó que “algunos han señalado que esta Acusación Constitucional no tiene sentido, porque lo más probable es que esté perdida”.

“Puede ser cierto, pero lo importante de esta Acusación Constitucional es que estamos notificando al actual presidente Sebastián Piñera, y a los futuros presidentes de Chile, que nunca más (habrán) graves violaciones a los derechos humanos”, señaló.

Mientras tanto, el diputado Tomás Hirsch (PH) mencionó que “esta acusación es histórica (…) porque también lo que hemos vivido en el país es dramático”.

“Han habido violaciones a los derechos humanos que son inaceptables y que jamás nos habríamos esperado vivir en democracia”, sostuvo.

“Acá hay un imperativo ético para esta Acusación Constitucional y cada diputada y cada diputado tendrá que tomar una decisión. Si va a estar del lado de la protección y garantía de los derechos humanos en nuestro país, o si va a estar protegiendo a quien los ha violado de manera brutal y sistemática”.

El oficialismo reacciona

El diputado Javier Macaya (UDI) dijo que esto “da cuenta de la capacidad de seguir generando odio, violencia y que es una cuestión que en definitiva yo lo lamento harto porque porque el ambiente que hemos vivido la semana pasada en el parlamento ha sido inédito en los últimos años”.

Lo anterior, a raíz de “la capacidad de ponerse de acuerdo en un nuevo texto constitucional, en un gran acuerdo transversal a toda la clase política y quienes están hoy en esta Acusación Constitucional son los mismos que se quisieron restar la semana pasada”.

“Creo que es un hecho sintomático de quienes son los que han estado desde el día uno por el quiebre institucional. Ahora, creo que es muy importante también decir con mucha fuerza que hay un tema de sentido común y pragmatismo y que no hay que mentirle a Chile”, sentenció.

Por último, explicó que “esta Acusación Constitucional no tiene ninguna, cero posibilidad de ser exitosa con los quorums que se exigen en la Constitución Chilena para destituir un Presidente de la República”.

Por su parte, la diputada Paulina Núñez (RN) dijo que la Acusación Constitucional es “una muy mala noticia para Chile. No es una mala noticia para el Presidente, para nuestra coalición. Es una mala noticia para Chile”.

Asimismo, sostuvo que ella fue parte de un grupo de parlamentarios que la semana pasada se amanecieron para lograr un acuerdo, “para dejar nuestras diferencias de lado, para ceder nuestras posturas y por lo tanto lograr un acuerdo”.

Además, señaló que “lo que no quieren los chilenos es que sigamos peleando, es que sigamos en nuestras trincheras”, aseguró.

Lee aquí el documento presentado: