Tal como lo venía pidiendo la oposión e incluso algunos sectores del oficialismo tras el estallido social, el presidente Sebastián Piñera concretó su cirugía al gabinete.

Partiendo por Andrés Chadwick, sumamente cuestionado por las violaciones a los Derechos Humanos durante el Estado de Emergencia, el remezón también golpeó al ministro de Hacienda, Felipe Larraín; al titular de Economía, Juan Andrés Fontaine; y el ministro de de Trabajo, Nicolás Monckeberg.

Sin embargo, tras los cambios, las miradas se posaron sobre los “sobrevivientes” al terremoto que sacudió al gabinete: la ministra de Educación, Marcela Cubillos; el ministro de Salud, Jaime Mañalich; y la titular de Transportes, Gloria Hutt.

Cubillos, sobreviviente además de la fallida acusación constitucional que impulsó la oposición, volvió a zafar de la batería de cambios en Palacio, pese a que el estallido social tuvo su germen en los estudiantes que organizaron para iniciar las evasiones masivas al Metro de Santiago.

En la misma línea, Hutt también se mantuvo en su cargo, aunque publicamente -y hasta que se desataron las manifestaciones- insistió en mantener el alza de 30 pesos en el sistema de transporte público e incluso desestimó los reclamos de los estudiantes diciendo que, como la tarifa de ellos no había cambiado, en realidad no tenían argumento para manifestarse.

Mañalich, por su parte, pasó desapercibido en todos los movimientos probablemente porque asumió recién en el cambio de gabinete anterior, en junio. Sin embargo, también agitó la indignación ciudadana en las últimas semanas -y especialmente en el gremio de la salud- negando la crisis en los hospitales, que en muchos casos tienen dificultades incluso para conseguir insumos médicos a raíz de profundos problemas presupuestarios.

A ella se suma además el enroque de Cecilia Pérez, quien pasó de vocería a deportes, y si bien en la práctica fue desplazada del comité político, queda debilitada considerando que su cambio sólo se interpreta como una forma de no removerla completamente del Gobierno.

En último lugar, también sorprendió en alguno sectores la continuidad de Rodrigo Ubilla en la Subsecretaría del Interior, que básicamente recibe réplica de cuestionamientos asociados a la gestión del ahora exministro Chadwick.