“Para algunos es una simple broma o un juego inocente; sin embargo, la mala utilización de los punteros láser contra las aeronaves reviste un enorme peligro que pone en riesgo la vida de tripulantes y pasajeros porque produce encandilamiento y -en algunos casos- la ceguera temporal de los pilotos”, señala el presidente del Colegio de Controladores de Tránsito Aéreo de Chile, Jorge Caro Gálvez.

El gremio señala que la situación es preocupante y por ello, solicita a las autoridades que se tomen medidas y se legisle tanto para prohibir la libre venta de punteros láser, como para sancionar a quienes realicen estas acciones que atentan contra la seguridad aérea.

“Lamentablemente, el ataque con punteros láser se ha transformado en un problema mundial que va en aumento. Y Chile no está al margen. Hace algunas semanas, los medios de comunicación relataron cómo un piloto de un avión comercial fue apuntado con un puntero láser sobre Tomé, en la región del Bío Bío. Gracias a que informó lo que estaba pasando a la torre de control, se dio aviso a las siguientes aeronaves que pudieron tomar medidas para evitar que los apuntaran”, precisa el timonel de los controladores aéreos de nuestro país.

Explica que el mayor número de ataques se produce en la noche, precisamente cuando se provoca mayor daño visual a las tripulaciones, ya que la vista está “ajustada” a un mínimo de luz a bordo, con una máxima dilatación de las pupilas. Con ello, el láser puede perjudicar peligrosamente la visión de los pilotos.

Añade que “nuestro país, a pesar de que las autoridades conocen el creciente problema que representa el ataque con punteros láser, aún no cuenta con una reglamentación condenatoria específica para estas acciones, aunque por las consecuencias podría constituir un cuasi delito de homicidio”, si así se determina tras un proceso judicial.

“Lo que sí está vigente es una normativa aeronáutica (DAN 1107) sobre los efectos que podría ocasionar y como reducirlos, pero claramente es insuficiente”, explicó.

En tanto, a la espera de una solución más concreta, los pilotos pueden adquirir lentes que reducen los efectos del láser en sus retinas y en el Aeropuerto de Santiago se han identificado los lugares donde repetidamente se registran estos actos contra los aviones, comentó.

“Es imperativo que Chile alcance el estándar de otros países que ya han regulado este tema, para prevenir accidentes y riesgos innecesarios. En Estados Unidos el atentado con punteros láser es considerado un delito federal, con multas de hasta 250 mil dólares (casi 175 millones de pesos) y cinco años de cárcel. Puerto Rico estableció en el 2014 una ley que prohíbe el uso ilegal de dispositivos láser; en España se modificó la ley de seguridad aérea para incluir el uso de cualquier tipo de dispositivo láser o luminosos que pueda poner en riesgo la seguridad de las operaciones aeronáuticas, y en el Reino Unido se estudia endurecer la actual normativa que sanciona a los que deslumbran deliberadamente a pilotos de aviones con hasta 2.500 libras (2,17 millones), una cantidad que algunos consideran insuficientemente disuasoria”, advierte Jorge Caro.

Finalmente, el presidente del Colegio de Controladores de Tránsito Aéreo, enfatiza que “tal como ha sido nuestra permanente posición de resguardo a la seguridad de las personas y aeronaves, los controladores aéreos planteamos este tema y sus riesgosos alcances, esperando que a la brevedad las autoridades dicten una normativa que imponga sanciones y multas a quienes ponen en riesgo la vida de tripulantes y pasajeros, así como las operaciones aéreas”.