De acuerdo a un informe entregado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 40% de los trabajadores en Chile lo hace de manera informal; situación ocasionada por la carencia de regularización respecto de su condición laboral.
Aunque la cifra es menor al 53% promedio de Latinoamérica, el reporte, de nombre “Perspectivas sociales y del empleo del mundo: tendencias 2019”, estableció que en Chile esta carencia de regularización laboral tiene relación con que los trabajadores no exigen contrato, ni tampoco el pago de sus cotizaciones.
Segundo Steilen, presidente de la Unión Nacional de Trabajadores, sostuvo que esta situación se explicaría por las bajas tazas de sindicalización producidas por la ideologización de los movimientos sindicales.
Respecto a los trabajos a nivel mundial, el informe de la OIT proyectó que para 2019 existirá un aumento de la precariedad de estos; pronosticando además, que en Chile el empleo sólo aumentaría un 1,4%.
El abogado laboralista, Ricardo Donoso, señaló que tener un empleo formal no mejora las condiciones laborales, pero sí es un punto de partida para generar políticas públicas y reformas con un foco real.
Además, el experto agregó que “este es un tema que se debe atacar con responsabilidad por el gobierno de turno”.
Debido a la falta de empleos formales y la ausencia de un sistema de protección social, en 2018 “360 millones de personas fueron trabajadores familiares auxiliares y 1.100 millones trabajaron por cuenta propia”.
