La Iglesia Evangélica anunció la implementación de un protocolo de acción respecto de los casos de abuso sexual en la institución religiosa, fortaleciendo los canales de denuncia, colaboración con la justicia y brindando apoyo a las víctimas.

En concreto, la medida fue dada a conocer por el obispo Eduardo Durán, cuyo marco regulatorio indicará los pasos a seguir frente a una acusación de este tipo y establece que la Catedral Evangélica no hará defensas corporativas ni pagará abogados para ministros de fe que sean inculpados en este tipo de delitos.

El director de comunicaciones del Concilio Nacional de Iglesias Evangélicas, el pastor Cristián Nieto, detalló que el objetivo principal de la medida es anticipar posibles delitos de este tipo, acompañando siempre a las víctimas en la búsqueda de la justicia.

En tanto, el diputado evangélico de Renovación Nacional, Leonidas Romero, advirtió que ningún protocolo o reglamento será suficiente para detener los abusos sexuales al interior de la Iglesia, mientras no se endurezcan las sanciones incluidas en la ley.

El vocero de los laicos de Santiago, Roberto Sánchez, valoró positivamente la iniciativa, pero afirmó que podría ser una estrategia para desviar la atención de la investigación por lavado de activos en contra del obispo Durán.

La norma, que está en su fase final de redacción, podría comenzar a regir a principios de abril.