El Gobierno chileno calificó como un “guiño electoral” la contrademanda que anunció el presidente boliviano, Evo Morales, ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por el uso de las aguas del río Silala.

Al respecto, parlamentarios de la comisión de Relaciones Exteriores cuestionaron el recurso del país altiplánico y dudaron de sus argumentos.

Lo anterior, luego que esta mañana el presidente Evo Morales anunciara que Bolivia contrademandará a Chile en La Haya.

El mandatario argumentó que “Bolivia tiene soberanía sobre el flujo artificial de las aguas del Silala, que ha sido diseñado, mejorado o producido en su territorio y Chile no tiene derecho a ese flujo artificial”.

De esta forma, el gobierno altiplánico modifica su postura, ya que Morales había asegurado, a mediados de junio, que no presentarían una contrademanda.

En Chile, la ministra subrogante de Relaciones Exteriores, Carolina Valdivia, calificó la acción del mandatario boliviano como un “guiño electoral”.

En tanto, el canciller Roberto Ampuero se refirió a esta situación y compartió la opinión de Valdivia a través de un video publicado en redes.

La postura chilena sostiene que el Silala, cuyas aguas fluyen desde Potosí, cruzan la frontera hacia Antofagasta desde hace más de un siglo; es un río internacional compartido; mientras que Bolivia señala que son producto de manantiales canalizados artificialmente hacia Chile.

La agente chilena en el caso Silala, Ximena Fuentes, afirmó que la acción altiplánica no tiene fundamentos.

El diputado del Partido Liberal, Vlado Mirosevic, el senador del PPD, Ricardo Lagos Weber, y el diputado de la UDI, Issa Kort, cuestionaron, también, los argumentos bolivianos.

Luego de la presentación de la contrademanda boliviana, la Corte Internacional de Jusitica citará a los respectivos agentes a una reunión para conocer las posturas por una eventual segunda ronda de réplica y dúplica.