Hoy jueves se celebra el Día mundial sin tabaco, producto altamente adictivo y nocivo. Su consumo prolongado puede generar distintos tipos de cáncer y enfermedades cardíacas, las que pueden derivar en la muerte.
Según las estadísticas de la Primera Red Chilena Oncológica Integrada (Oncoloop), en Chile mueren 2.989 personas al año por cáncer de pulmón.
Dicha cifra corresponde al 11,9% de las defunciones provocadas por este tipo de patologías. “Si bien puede afectar a cualquier persona, el tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo atribuibles”, explicó Tatiana Corbeaux, directora ejecutiva de Oncoloop.
Es por ello que, bajo el lema “Danos un Respiro”, hacen un llamado para que en la Ley Ricarte Soto -quien murió por esta enfermedad- se integren este tipo de tratamientos. “No queremos un país desigual, en donde sólo los que tienen recursos acceden a terapias de primera línea, mientras que aquellos de bajos recursos se someten a tratamientos de hace más de diez años atrás”, advirtió la especialista.
Pese a ello, reconoció que “afortunadamente, hoy tenemos una oportunidad, ya que se está discutiendo la incorporación de nuevas terapias para cáncer de pulmón, por lo que se requiere responsabilidad, voluntad y eficiencia para definir prioridades y dar respuestas a las necesidades que presenta la población”.
Problemas al corazón
De acuerdo a las investigaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), una persona muere cada seis segundo en el mundo a causa del consumo de tabaco y sus químicos relacionados. Cada año mata a seis millones de personas.
Si bien el sistema respiratorio es el más afectado, los efectos nocivos atacan a todo el organismo. Por ejemplo, en el ámbito cardiovascular existe un mayor riesgo de presentar un infarto, accidentes vasculares y obstrucción de arterias.
Es por ello que la OMS decidió enfocar la campaña de este año en los daños cardíacos, explicando que es un factor a considerar en el desarrollo de una enfermedad coronaria y relacionadas.
Además de este tipo de daño, la neumóloga de la Clínica Ciudad del Mar, Mónica Gutiérrez, explicó que “en comparación con una persona normal, un fumador tiene 30 veces más riesgo de padecer cáncer pulmonar y cuatro veces más riesgo de presentar un cáncer laríngeo. También son más propensos a desarrollar cáncer en las cuerdas vocales, boca, estómago, páncreas, riñón, vejiga, mama, útero y varios órganos más”.
Junto con ello, aseguró que es uno de los principales causantes de infertilidad en hombres y mujeres. “Está comprobado que provoca una disminución en la producción de espermios en los hombres, mientras que en las mujeres produce una mayor predisposición al cáncer uterino y mamario (…) Cuando una mujer fumadora además toma pastillas anticonceptivas, el riesgo de sufrir un infarto aumenta 20 veces”, advirtió.
Considerando estos preocupantes efectos nocivos, la profesional dio cinco razones para dejar de fumar:
– Antes de los 50 años, disminuye a la mitad el riesgo de muerte en los próximos 15 años.
– Al año de dejar el cigarro, el riesgo de morir por enfermedad coronaria baja a la mitad.
– A los 10 años de cesación, el riesgo de cáncer pulmonar baja en un 30% a 50%.
– Reduce el riesgo de cáncer de laringe, esófago, páncreas y vejiga.-
-Disminuye la posibilidad de presentar enfermedad pulmonar obstructiva crónica, neumonía, úlcera gástrica y duodenal.
El cigarro impide dormir bien
No sólo enfermedades mortales puede generar el tabaquismo, sino que alteraciones en el día a día de los consumidores. Una de ellas es en la calidad del sueño, puesto que aumenta los ronquidos y puede producir insomnio.
De acuerdo a las cifras de la Encuesta Nacional de Salud, el 45% de los hombres y el 37% de las mujeres fuman en Chile, mientras que más de 60% sospecha tener algún trastorno del sueño.
“Es ampliamente conocido que fumar aumenta el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares, problemas que se incrementan en pacientes fumadores que roncan y padecen apneas en el sueño. La apnea del sueño provoca que la persona se ahogue en la noche y entre menos oxígeno al cuerpo, aumentando el riesgo cerebro y cardiovascular dificultando el control de la hipertensión”, explicó Juan Carlos Said, médico internista de Clínica Somno.
Conoce cuatro problemas que genera el cigarro al dormir:
– Irrita la nariz y la garganta hasta la inflamación, provocando una reducción del espacio por el que pasa el aire, facilitando los ronquidos.
– Puede producir inflamación crónica de las cuerdas vocales, un fenómeno llamado Edema de Reinke, que también obstruye la vía aérea alta, provocando ronquidos y apneas.
– La nicotina es un compuesto activo que provoca adicción al tabaco. Al ser un estimulante, afecta la calidad del sueño y puede provocar insomnio. Los fumadores tienen a despertar más veces durante la noche o a experimentar sueño interrumpido.
– El tabaquismo facilita el más grave trastorno del sueño: las apneas. Estas son episodios de ahogo en la noche por el colapso total o casi total al interior de la faringe, provocando que la persona pare de respirar momentáneamente.
