El diputado y candidato presidencial independiente, Jose Antonio Kast, llegó hasta la Corte de Apelaciones de Santiago para presentar una demanda por discriminación arbitraria en contra de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), liderada por Bárbara Figueroa.

De este modo, el parlamentario decidió invocar la ley Zamudio luego que la presidenta de la entidad optara por reunirse sólo con los candidatos presidenciales de izquierda, dejando de lado a Sebastián Piñera y al propio Kast.

Lo anterior, pese a que fue cuestionado respecto a la contradicción que implica haber votado en contra de la iniciativa el 8 de mayo de 2012, junto a sus pares de la UDI Enrique Estay, María Angélica Cristi, María José Hoffmann Arturo Squella, Gonzalo Arenas, Nino Baltolu, Javier Hernández, Felipe Ward, Pedro Álvarez- Salamanca, Iván Norambuena y Gastón von Mühlenbrocok, además del DC Jorge Sabag, el PRI Pedro Araya y los independientes Miodrag Marinovic y Marta Isasi.

Consultado sobre el tema antes de la votación, el 13 de abril de ese año, dijo a La Segunda que para avanzar hacia la no discriminación aún falta lo más importante: “Un cambio en las conductas, en el trato humano, en las relaciones que entablamos con homosexuales, inmigrantes… con todo aquel que pueda sentirse discriminado. Ese es un cambio cultural, un gran paso que, como sociedad, todavía nos falta dar”, sostuvo en ese entonces.

En ese contexto, este martes intentó explicar su postura para invocar dicha normativa contra la CUT: “Estamos usando una ley como la Ley Zamudio, que yo voté en contra, porque creo que no se necesitaba una ley para ser discriminados. Y aquí, los mismos que apoyaban entusiastas esta ley son los primeros en discriminar y yo quiero dejar en evidencia este doble estándar de aquellos que defienden la diversidad, las opiniones distintas y todos los días proclaman ese discurso y en la práctica hacen otros”, sostuvo Kast en un punto de prensa

“Yo quiero dejar en evidencia ese doble estándar de aquellos que defienden la diversidad, las opiniones distintas, y todo el día proclaman ese discurso y en la práctica hacen otro. Hoy vemos que la presidenta de la CUT sigue usando a la CUT como un parlante del PC y eso es inaceptable. La CUT es una entidad gremial, tiene que defender los derechos de todos los trabajadores, no de los comunistas. Los comunistas también son trabajadores y los tiene que defender en esa línea, por ser trabajadores chilenos, no por ser militantes del PC. Pero eso la presidenta de la CUT, militante activa del PC, no lo entiende”, añadió el diputado.

Para cerrar, recalcó que “queremos es que la justicia determine que este fue un acto discriminatorio porque ella señala que se va a sentar a conversar con todos los candidatos presidenciales de izquierda, del continuismo de este gobierno, y que no está dispuesta a sentarse a hacerle los planteamientos a Sebastián Piñera y a José Antonio Kast. Eso es discriminación y eso es inaceptable para una entidad gremial como es la CUT”.