Con estas últimas víctimas la cifra de policías muertos en Haití en lo que va del año asciende a 21. Los hechos ocurrieron cuando una patrulla pasaba por la zona que estaba abandonada y fue blanco de la pandilla.

A manos del grupo dirigido por Ti Makak, tres agentes de la Policía Nacional de Haití murieron este domingo en una emboscada tendida en Thomassin, a las alturas de Puerto Príncipe.

Estas últimas víctimas elevan al menos a 21 el número de policías asesinados en el país desde principios de año.

El Sindicato Nacional de Agentes de Policía de Haití (Synapoha) informó que los hechos ocurrieron cuando una patrulla que pasaba por la zona fue blanco de la banda criminal, alojada en el barrio de Laboule 12, totalmente abandonado por la población desde hace meses a causa del aumento de la inseguridad.

Pierre-Paul Junior Dorcely, Robenson Nicolas y Medeze Fortilien, son los nombres de los agentes destinados a la subcomisaría de Thomassin, según confirmó la Policía Nacional Haitiana.

El Primer Ministro, Ariel Henry, condenó el asesinato: “Nuestros hermanos han caído hoy, una vez más, bajo las balas asesinas de matones sin ley“, reza una breve nota.

Aprovechando la ocasión para expresar sus sinceras condolencias a las familias y hermanos de armas de “estos valientes policías”, Henry renovó su determinación “inquebrantable” de hacer todo lo posible para crear un “clima de seguridad y estabilidad en el país, que ha sufrido demasiados derramamientos de sangre y luto”.

“No somos insensibles a esta situación y nos esforzamos por aportar una solución duradera”, concluyó el Primer Ministro en su nota hecha pública horas después de la emboscada.

Desde hace unos 5 años, la inseguridad reina en Haití y a raíz del asesinato del presidente Jovenel Moise en julio de 2021, la situación se ha degenerado totalmente hasta el punto de que las bandas armadas han conseguido controlar casi toda el área metropolitana de Puerto Príncipe sin que las autoridades sean capaces de reconducir la situación.