El papa Francisco realizó nuevas declaraciones en torno a la homosexualidad y criticó duramente la enseñanza de la “teoría del género”, especialmente después de que Francia comenzará a enseñarlas en la educación formal.

Para el jefe de la Iglesia católica, “tener tendencias homosexuales o cambiar de sexo es una cosa y convertirlo en “una enseñanza en las escuelas” es otra.

Se trata de una voluntad de “cambiar las mentalidades”, de una “colonización ideológica”, estimó el papa, que el sábado denunció en Tiflis la “teoría de género” como uno de los aspectos de una “guerra mundial para destruir el matrimonio”.

La teoría del género ya no plante una división según sexo(hombre y mujer), si no por su sexualidad, abarcando más aspectos que el meramente biológico.

El papa recalcó que las personas homosexuales o transexuales deben ser acogidas, acompañadas y también integradas lo más posible.

He acompañado a personas con tendencias, con prácticas homosexuales, las he acercado al Señor. Algunas no pueden pero nunca las abandoné“, aseguró.

Francisco contó que recibió una carta de un español que había decidido cambiar de sexo para ser un hombre.

“Se casó, cambió de estado civil y me escribió esa carta para decirme que sería un consuelo venir a verme con su esposa. Los recibí”, contó. “La vida es la vida y las cosas se deben tomar como son”, añadió, y explicó que “en la parroquia este español conoció a un viejo sacerdote dispuesto a confesarlo y a su sucesor más joven que lo mandaba ‘al infierno"”.

“No digan que el papa santificará a los trans, que ya veo los titulares”, precisó Jorge Bergoglio. “Es un problema moral que se debe resolver como sea pero siempre con misericordia”, insistió.

Preguntado por sus próximos desplazamientos, el papa Francisco confirmó que el próximo año viajará a Portugal, pero “solamente a Fátima”, que el 13 de mayo celebrará el centenario de las primeras apariciones.

También expresó su deseo de visitar la India y Bangladesh “casi seguro”, pero sin precisar fecha, y evocó un viaje a África, a un país aún por determinar en función del clima y de la situación política cuando llegue el momento.