El secretario general de la OTAN urgió este miércoles a Rusia a actuar frente al “serio recrudecimiento” de la violencia en Ucrania, donde los 20.000 habitantes de la ciudad de Avdiivka se encuentran atrapados en los enfrentamientos entre separatistas prorrusos y soldados ucranianos.

“Llamamos a Rusia a usar su considerable influencia con los rebeldes para poner fin a la violencia”, aseguró Jens Stoltenberg, para quien Ucrania vive “el más serio recrudecimiento de la violencia en mucho tiempo” con más de 5.600 violaciones del alto el fuego la semana pasada.

Las declaraciones de Stoltenberg en Bruselas llegan cuando los enfrentamientos en el este de Ucrania, los más sangrientos desde la instauración de una tregua a finales de diciembre, han dejado 19 personas desde el domingo.

Stoltenberg estimó que la situación humanitaria en Avdiivka era “terrible”. “Llamamos a una inmediata vuelta al cese del fuego y la retirada de todas las armas pesadas prohibidas por los acuerdos [de paz] de Minsk”, añadió.

Los habitantes de Avdiivka, ciudad industrial controlada por las fuerzas de Kiev a unos diez kilómetros al norte de Donetsk, no tienen electricidad y el agua corriente se corta regularmente. La calefacción es además esporádica, con la temperatura que cae a -12ºC.

El conflicto en Ucrania, comenzado hace casi tres años, dejó casi 10.000 muertos. Kiev y las potencias occidentales acusan a Moscú de apoyar financiera y militarmente a los rebeldes prorrusos, lo que Rusia niega.