La presidenta de la Cámara Baja de Estados Unidos, Nancy Pelosi, exigió que se retiren del Capitolio once estatuas de confederados que se oponían al fin de la esclavitud, en un momento de intenso debate tras la muerte a manos de la policía de un ciudadano negro.

“Los monumentos de hombres que defendían la crueldad y la barbarie para lograr un fin puramente racista son una afrenta grotesca a los ideales” estadounidenses de democracia y libertad, dijo este miércoles la líder de la mayoría demócrata en una carta dirigida a una comisión bipartidista.

Esta solicitud llega después de que algunas estatuas han sido atacadas por manifestantes en el contexto de marchas contra el racismo a causa de la muerte de George Floyd.

Este domingo derribaron una estatua de un negrero muerto en el siglo XVIII, Edward Colston, en el centro de Bristol, una ciudad del suroeste de Inglaterra con un pasado esclavista.

En tanto, la noche de este martes una estatua de Cristóbal Colón que está ubicada en Boston fue decapitada.