Varias regiones de Uzbekistán, así como la ciudad kazaja de Almaty y la capital kirguisa, Biskek, han sufrido un gran apagón este martes por la mañana.
Millones de habitantes de Kazajistán, Kirguistán y Uzbekistán se quedaron sin electricidad el martes por un apagón masivo en Asia Central que ha paralizado metros y aeropuertos y ha dejado a esquiadores varados en teleféricos.
Todavía no se ha encontrado la causa de la avería que ha provocado el corte eléctrico en estas tres exrepúblicas soviéticas donde este tipo de fenómenos son frecuentes a pesar de las inversiones efectuadas en la red energética desde su independencia hace tres décadas.
Gran parte de Almaty, la capital económica de Kazajistán, estaba sin electricidad, al igual que las capitales de Uzbekistán, Tashkent, y Kirguistán, Biskek. Según medios y autoridades, los cortes afectan amplias extensiones de territorio de estos tres países.
El ministerio de Energía de Uzbekistán señaló en un comunicado difundido en Telegram que el apagón fue debido a un accidente en la red de Kazajistán.
“Como resultado de un gran accidente en las redes energéticas de la República de Kazajistán, hubo un apagón en las ciudades de Almaty, Shymkent, Taras, (en la región de) Turkestán y las zonas adyacentes”, indicó el comunicado.
“La red energética uzbeka, que está conectada con la Red Eléctrica Unificada, quedó dañada por un accidente que desencadenó repentinos cambios de voltaje y frecuencia en 530 línea desde Kazajistán”, añadió.
Los cortes se deben a “un accidente que afectó a la red energética regional”, dijo a la Agence France-Presse un portavoz del ministerio de Energía de Kirguistán, sin aportar más detalles.
Kegoc, la empresa kazaja de electricidad, informó de una “sobrecarga eléctrica”, pero tampoco ofreció más precisión sobre la avería.
La red energética de Asia Central se ha visto afectada por una importante sequía estival que ha reducido la generación hidroeléctrica de Kirguistán, un importante productor regional.
Por otro lado, el auge en el minado de criptomonedas en esta región, particularmente en Kazajistán tras la prohibición de esta actividad en China, ha aumentado la demanda y provoca tensiones en el suministro.
Infraestructuras paralizadas
Según la agencia de prensa rusa Ria, el aeropuerto de Almaty continuaba funcionando con normalidad, pero el de Tashkent frenó el despegue de vuelos debido al apagón. Otros aeródromos regionales también se vieron afectados.
En Biskek, “el aeropuerto funciona (…) pero no a plena capacidad”, dijeron sus gestores en un comunicado citado por medios locales.
Según estas informaciones, el aeropuerto recurrió a una fuente de electricidad de emergencia y permite el aterrizaje de aeronaves, pero ha suspendido la facturación para algunos vuelos de salida.
Todavía en la capital de Kirguistán, los medios señalan que la avería interrumpió el funcionamiento de las estaciones de bombeo, lo que está afectando a la distribución de agua.
Y en Tashkent, el metro estaba detenido y el flujo de agua del grifo era escaso, constató un periodista de la Agencia AFP.
Además, agencias rusas indicaron que en una estación de esquí cercana a esta ciudad unas 80 personas quedaron bloqueadas en los teleféricos y tuvieron que ser rescatadas.