Los matinales de la televisión chilena suelen abordar distintos temáticas sociales y contingencia, con el objeto de que sus animadores y panelistas se sinceren, comenten y logren conectar con los televidentes a través de sus propias experiencias.

Tal fue el caso del matinal Mucho Gusto, donde pasado las 09:00 horas conversaron sobre violencia de género, un tema que afecta a miles de mujeres de nuestro país y del que muchas no se atreven a hablar por lo fuerte que pueden haber sido tales situaciones.

Algo así fue lo que vivió Ivette Vergara, quien en medio de la conversación reconoció que ella fue víctima de violencia durante un pololeo cuando era más joven.

“No es tan fácil decir ‘yo puedo cortarlo desde el comienzo’, ustedes me ven acá y dicen ‘pucha la Ivette, tiene una personalidad súper potente, yo viví violencia en el pololeo y no me di cuenta“, partió diciendo la comunicadora.

Captura | Mega

En la misma línea, aseguró que no se dio cuenta cuando esto comenzó ya que estaba muy enamorada de esa persona. “Mi lucha en ese momento era (preguntarme) ‘¿Por qué no me quiere tanto como yo lo quiero a él? Voy a luchar por ser mejor, por darle en el gusto’, pero yo no me sentía maltratada, no sentía que él me hacía daño, yo solo sentía que no me quería tanto como yo a él“, agregó.

Asimismo, agregó que fue una relación que duró varios años y comenzó a los 17, y que sus padres nunca estuvieron muy de acuerdo con ese romance, pues además él era cinco años mayor que ella. “A mis papás nunca les gustó, ellos detectaron esto pero de manera a veces sutil, mi papá me enfrentaba y me decía ‘este tipo no te conviene’ pero yo sentía que hablaba mal de él y lo defendía“, indicó.

A tal llegó su convencimiento, que llegó un minuto en que Ivette comenzó a vestirse cómo él quería, pese a que ella se sentía cómoda con tenidas ‘sport’ ya que en ese tiempo era muy deportista. También reconoció haber aguantado tratos abusivos, llamadas telefónicas con garabatos y que ella disimulaba inventando cosas y ocultando información para no tener problemas.

Finalmente, logró darse cuenta y terminó con esa relación, sin embargo, con el paso del tiempo le fue tomando el peso a lo que vivió y a lo dramático que pudo haber sido el no salir a tiempo de ese círculo de violencia.