Juan Recabarren se hizo conocido en 2015 luego de que el noticiero de Chilevisión realizara un reportaje sobre cómo dedica su vida a ayudar al resto.
Conocido como el “Farkas pobre”, vive en San Antonio, es padre soltero que crió a sus hijos solos desde que eran pequeños y trabaja en una feria libre. Todo lo que gana lo destina a ayudar a personas que lo necesiten.
Tras revelarse su caso, la empresa Cidef Chile le regaló un furgón, con el cual ha podido continuar su labor caritativa, y además el empresario Leonardo Farkas le donó 5 millones de pesos.
Ahora, dos años después de eso, por fin pudimos conocer qué ha sido de su vida, pues apareció en el programa de televisión Espías del amor, también de Chilevisión, que investiga a personas que mantienen relaciones por internet.
En la actualidad Juan continúa ayudando a personas con su furgón a diario, pero el motivo por el que acudió al show es otro. Y es que el hombre mantenía una relación por Facebook con una mujer llamada Marina, que vivía en República Dominicana.
Según contó, tras aparecer en televisión hubo muchas mujeres que se contactaron con él porque quería conocerlo, y entre ellas con la que más conectó fue Marina.
Con ella hablaba todos los días por medio de Facebook y su relación había llegado a un punto serio, pues incluso estaba considerando casarse con ella. Sin embargo, había un problema: jamás se habían visto en persona y él quería saber si la mujer era real… o se trataba de un engaño.
Tras una investigación, los conductores del programa tuvieron que darle una mala noticia a Juan: le dijeron que Marina le había mentido sobre su nombre y que en realidad no vivía en Santo Domingo (capital de República Dominicana).
Pero ahí no acaba la historia. Luego, los animadores fueron con Juan a Algarrobo, desde donde había recibido una llamada pidiendo ayuda, y allí se encontraron… con Marina en persona.
Resulta que los conductores le habían mentido a Juan para darle una sorpresa. Así, le hicieron creer que Marina lo había engañado, mientras secretamente la traían a Chile para que se encontrara con su enamorado.
Juan y Marina se abrazaron en cuanto se vieron, y él estaba tan sorprendido que no reaccionó de inmediato. Tras ello, la mujer confesó que ella también estaba enamorada de Juan y que quería casarse con él.
Al final del programa, Juan volvió a aparecer en pantalla, en una grabación realizada meses después del primer encuentro con Marina. Allí relató que su “polola” se quedó varios días en nuestro país y que ambos se casaron “simbólicamente”.
Por el momento, ella continúa viviendo en República Domínica, pero están haciendo planes para que se venga definitivamente a Chile y se puedan casar, esta vez de verdad. De modo que esta fue una linda historia de amor con final feliz.
