Más de un año ha pasado desde que el cantante colombiano Maluma compartió un registro luego de comprarse su avión privado. Llegó a las lágrimas, lo que le valió ser blanco de críticas por emocionarse por lo material. En ese momento evitó referirse a la controversia, aunque ahora reconoció que se ha “jodido con cojones para poder tenerlo (sic)”.

Cuando colgó el video en Instagram, el intéprete de Hawái y ADMV deslizó que su nueva adquisición era un golpe en la cara para aquellos que no creyeron en él ni en su carrera.

“Me acuerdo hace 8 años atrás cuando fui a hacer una entrevista en una estación de radio X en Colombia, me cerraron las puertas, a parte de eso no creían en mó y muchos decían que no iba a llegar a ningún lado”, contó

“Pues parceros, ¡ahora si que vamos llegar lejos! BIENVENIDOS A “ROYALTY AIR” con este avión tocamos la Luna”, agregó.

Su llamado fue a que los seguidores “sueñen sin miedo, nunca crean en un NO como respuesta, ustedes son el timón de su vida y pueden llegar hasta donde su mente y corazón quieran.Este es mi legado, inspirar y demostrar que los sueños sí se hacen realidad”.

En conversación con su par musical Nicky Jam en el programa de Youtube The Rockstar Show, Maluma recordó que quiso hacer público el momento porque buscaba “mostrarle al mundo entero mi emoción, porque me he jodido con cojones para poder tenerlo (…) yo quiero inspirar a la gente, y a los que dijeron ‘tan hueón, está llorando porque compró un avión’, les digo claro, y voy a seguir llorando mil veces, y si me compro otro lo volveré a hacer”.

Para él, en medio de los viajes y tours en su carrera, se trata de una “necesidad” y no de un “lujo”, afirmando que lo hizo “por mi tranquilidad mental y mi paz”.

“Tener un avión es un estrés, el costo, lo que hay que pagar, todo eso, no es solo lo compro y vamos (…) No me arrepiento de tener mi avión, pero eso le falla una cosa y otra, que la tuerca. Pero todo vale la pena y por eso he trabajado para tener mis cosas”, detalló.

Así, agregó que otro de sus argumentos para comprarse el avión fue el evitar subirse a vuelos comerciales, pues los fanáticos se agolpan para saludarlos lo que, incluso, habría provocado retrasos y pérdidas de tickets.

“No es que a uno le choque tomarse fotos y compartir momentos con los fans, pero hay momentos donde uno tiene que montarse al avión o pierde el vuelo, más que todo por eso me compré el avión”, se explicó.

Según publicó la revista Forbes para México la adquisición denominada Gulfstream G450 y avaluada en unos 25 millones de dólares, llegó a Medellín, su ciudad natal, a comienzos de septiembre de 2019.

El transporte aéreo cuenta con mesas plegables, sillones, una cocina completamente equipada, un horno de alta temperatura, refrigeradores y tres baños. Su capacidad es de 14 pasajeros.

GlobalAir