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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El ajuste fiscal comprometido para este año incluye un recorte de gasto público hasta 2029, aunque economistas señalan que este no será suficiente y que se deben abordar problemas estructurales como la evasión en el transporte público, los deudores del CAE y las licencias fraudulentas, apuntados como "bolsones" de recursos que se estarían perdiendo. En este contexto, se destaca la importancia del crecimiento como motor de recaudación y la necesidad de un acuerdo político amplio para lograr un recorte del gasto público.

El ajuste fiscal para este año ya está comprometido, y el recorte permanente del gasto se vislumbra por lo menos, hasta el 2029.

Pero, ¿es suficiente?

Los economistas coinciden en que no, pero conscientes también de que lo, que se puede hacer por otras vías, implica necesariamente legislar en un año especialmente complejo por acercarse las elecciones.

Ajuste fiscal y recorte de gasto

Mientras la comisión correctiva del gasto aún no se conforma, los analistas apuntan a problemas estructurales donde hay “bolsones” de recursos que se están perdiendo:

La evasión en el transporte público, el bajo cobro de los deudores del CAE y otro punto que abordó el docente investigador del Centro de Investigación de Empresa y Sociedad de la UDD, Carlos Smith: las licencias médicas fraudulentas.

Sobre este punto, ya hay un proyecto en discusión que busca aumentar las sanciones en estos casos, pero no todo es “terreno conquistado”.

El exministro de Economía de Michelle Bachelet, Alejandro Ferreriro, apuntó a lo que esta “estrechez” le significará a la agenda de un próximo gobierno.

“Esto requiere o aumentar ingresos, que en épocas de bajo crecimiento es difícil lograr vía impuestos, o una reducción del gasto público”, explicó Ferreiro, agregando que debe haber un “acuerdo político amplio, al estilo del que observamos en la reforma previsional” respecto a un recorte de gasto.

Otro punto al que se alude es el crecimiento como principal motor de la recaudación. Si bien en este contexto ya se descartó una reforma tributaria o cambios impositivos, hay otras trabas que continúan estancando la economía.

Al respecto, el investigador del Centro de Estudios Públicos y coautor del estudio “El costo económico de la permisología”, Gabriel Ugarte, se refirió al proyecto que actualmente se discute en el Congreso y que “queda corto”.

La primera semana de mayo se conformará un grupo de expertos que plantee una reforma más de fondo al gasto público, que deberá entregar un informe de recomendaciones al Ministerio De Hacienda y la dirección de presupuestos a más tardar el 31 de julio.